Menú
Actividades grupales para niños con autismo
Actividades grupales para niños con autismo

AUTISMO

Actividades grupales para niños con autismo

Si tienes un hijo con autismo, existen actividades grupales que mejorarán sus habilidades sociales.

Los juegos cooperativos son una forma ideal para que los niños autistas practiquen habilidades sociales en un ambiente divertido y no amenazante para ellos. Las actividades grupales cooperativas son más efectivas para enseñar habilidades sociales cuando la actividad se basa en los temas preferidos de los niños. 

Por ejemplo, si los niños están fuertemente centrados en el arte, una actividad de pintura cooperativa es ideal.  Para un grupo de niños que comparten un interés en los trenes, un juego con temas ferroviarios les ayudará a explorar habilidades difíciles de una manera cómoda y familiar.

En este sentido, es necesario realizar actividades que se centren en sus intereses para que al mismo tiempo que disfrutan de lo que están haciendo se trabajen las habilidades sociales, tan importantes en el desarrollo y para ellos en concreto debido sus dificultades innatas sobre las interacciones sociales.

Los juegos de improvisación teatral también son excelentes actividades grupalesLos juegos de improvisación teatral también son excelentes actividades grupales

Actividades creativas

Si bien los esfuerzos creativos son a menudo actividades solitarias, pueden ser la base de actividades grupales.  El juego con arte es una excelente manera de fomentar la cooperación. Este juego es ideal para dos o cuatro niños. Cada niño (o un par de niños) tiene cinco minutos para reunir materiales del área de arte, que colocan en una bolsa de papel. Los niños o los equipos intercambian bolsas y tienen de 30 a 45 minutos para crear un proyecto de arte utilizando los materiales que se les han dado. Los niños pueden intercambiar materiales, colaborar o trabajar juntos para crear un proyecto conjunto más grande.

Los juegos de improvisación teatral también son excelentes actividades grupales para niños autistas, ya que uno de los principios básicos de la improvisación es un entorno seguro y de apoyo donde todos son libres de asumir riesgos creativos. Las escenas de balbuceo, donde los actores representan una escena usando solo palabras de balbuceo, no se permiten frases comprensibles, es una forma divertida para que los niños autistas se relajen y participen sin luchar con las habilidades verbales.

Juegos de pelota

Los juegos de pelota son una excelente manera para que los niños autistas practiquen habilidades motoras básicas mientras se divierten y trabajan en habilidades sociales.  La captura de patrones es un buen juego grupal.  Varios niños están dispuestos en una forma geométrica, como un cuadrado, un triángulo o una estrella, y pasan una pelota en un patrón predefinido para que la pelota delinee la forma.

Los desafíos de equilibrio también pueden ser divertidos para los niños con trastornos del espectro autista.  Desafía a dos niños a sostener una pelota del suelo sin usar sus manos.  Podrían ponerse de espaldas y sostener la pelota entre sus omóplatos, o sentarse en el suelo y usar sus pies para levantar la pelota. Anima a los niños a hacer una lluvia de ideas sobre diversas estrategias y decidir de manera cooperativa cómo llevar a cabo la tarea.

Los desafíos de equilibrio también pueden ser divertidos para los niñosLos desafíos de equilibrio también pueden ser divertidos para los niños

Actividades al aire libre

Las actividades al aire libre, como caminar o plantar semillas en un jardín, son excelentes maneras de alentar a los niños autistas a participar en actividades grupales. Antes de una caminata, proporciona un mapa de ruta al grupo y pídeles que trabajen juntos para idear el camino que recorrerán para llegar a un destino predeterminado. A lo largo del sendero, dale a cada niño la oportunidad de liderar el grupo y usar el mapa para poder caminar en el sendero correcto.

Plantar en un jardín escolar o comunitario es una excelente manera para que los niños autistas trabajen en grupo para lograr un objetivo a largo plazo. Dependiendo de sus niveles de habilidad, pueden participar en la planificación del jardín, la siembra, el riego, el deshierbe y la cosecha de verduras. Esto también puede ser una forma de alentar a aquellos con hábitos alimenticios muy limitados a probar un nuevo tipo de alimento.

Te puede interesar