A los adolescentes les cuesta levantarse por las mañanas y es normal porque están creciendo y sus hormonas parece que les hace pegarse a la cama más tiempo de la cuenta. Mientras que un adolescente debe ser más independiente, a veces levantarse de la cama a tiempo para llegar a la escuela se convierte en un problema mayor a medida que crece.
Enseñar a tu hijo a levantarse de la cama a tiempo, incluso cuando está cansado, es una habilidad importante para la vida. Parte de convertirse en un adulto responsable es poder comenzar a trabajar a tiempo y ser capaz de demostrar responsabilidad. Entonces, si tu hijo llega tarde a la escuela todas las mañanas, interviene. Debes ayudarle a aprender cómo asumir más responsabilidad por su comportamiento.
Sin embargo, despertarle repetidamente y empujarle hacia la puerta solo aumentará su dependencia de ti. Por eso es importante responsabilizarlo por su propio comportamiento... Que se él quien se de cuenta de qué debe hacer y cómo hacerlo (aunque tú le estés guiando casi sin que se dé cuenta).
Ten un plan
Puede que tu hijo le de a 'repetir alarma' demasiadas veces o quizá ni siquiera escucha la alarma... Los niños maduran a diferentes edades, y tú debes ser menos estricto con un niño de 13 años que con uno de 17 o 18 años que parece que no puede estar listo para llegar a la escuela antes de que suene la campana... El tipo de personalidad de tu hijo también es importante, algunas personas simplemente no ven que llegar tarde 5 o 10 minutos sea un problema, aunque para otras personas, es bien diferente.
Si tu hijo llega tarde a la escuela, toma medidas inmediatas. No solo podría perjudicar su educación, sino que también le prepararía para el fracaso más adelante en su vida. Es probable que un adolescente que no puede salir a la escuela a tiempo se convierta en un adulto que no pueda llegar a tiempo al trabajo.
Comparte tus expectativas
Una vez que tu hijo haya enfrentado a las consecuencias del retraso, tendrás que hablar con él. Hazle saber lo que le espera en el futuro con ese comportamiento. Por eso debe cambiar y levantarse a tiempo cada mañana e ir a dormir antes por la noche. Deberá estar en la puerta de las clases 5 minutos antes de que toque entrar.
Igual que tu hijo está capacitado para manejar su propio tiempo, también debe saber lo que esperas de él. Puedes decirle algo como: "Tienes la edad suficiente para empezar a levantarte a tiempo cada mañana. Espero que pongas la alarma, te levantes y salgas por la puerta a tiempo sin ningún aviso de mi parte".
Resolver problemas juntos
Llevar a tu hijo adolescente a la puerta y llegar a la escuela a tiempo puede requerir un poco de trabajo en equipo. En lugar de pelear por su puntualidad, habla con él sobre cómo mejorar las cosas. Dile qué puede hacer cada día para mejorar ese hábito que puede traerle problemas en el futuro.
Es necesario identificar la raíz del problema. ¿Está demasiado cansado porque se está levantando demasiado tarde? ¿Es desorganizado y corre para encontrar cosas por la mañana? O, ¿juega con el teléfono por la mañana, lo que la hace llegar tarde?
Cualquier cosa que esté ocurriendo es una oportunidad para resolver problemas juntos. Esto le enseñará cómo abordar los problemas que surgen en su vida haciendo una lluvia de ideas sobre posibles soluciones y experimentando con diferentes ideas. Pide su opinión sobre cómo puede llegar a tiempo a la escuela. Puede tener algunas soluciones simples o creativas que le ayudarán a salir por la puerta con suficiente tiempo. Anotad algunas soluciones, tales ideas de gestión del tiempo. Preparar su almuerzo o llenar una mochila la noche anterior podría darle más tiempo.
Un reloj despertador
La alarma del móvil no siempre es suficiente y es mucho mejor y más efectivo tener un reloj despertador y que esté lejos de la cama. Comprar un reloj de alarma puede ser de gran ayuda para sacarle de la cama a tiempo. Con el despertador al otro lado de la habitación, tu hijo tendrá que levantarse de la cama para apagarlo.
¿Existen problemas de sueño?
Muchas escuelas secundarias comienzan muy temprano en la mañana y los relojes biológicos de los adolescentes no están orientados hacia un comienzo tan temprano, aunque deben hacerlo. Pero, a pesar del debate sobre los tiempos de inicio temprano de la escuela, l a mayoría de escuelas siguen comenzando a las 8 de la mañana.
Por eso es importante apoyar los esfuerzos de tu adolescente para dormir lo suficiente. Establece una hora razonable para acostarse y que mantenga una rutina constante, incluso los fines de semana. No dejes que tu hijo duerma hasta tarde en los días que no hay clases ya que puede interferir con su horario de sueño.
Si tu hijo adolescente descansa lo suficiente, se sentirá mejor para levantarse y salir a tiempo. Así que trabaja con tu hijo adolescente para desarrollar buenos hábitos de higiene del sueño.
Consecuencias
Crea consecuencias que motive a tu hijo adolescente a salir por la puerta a tiempo. Sin embargo, no tienes que darle dinero si lo hace bien, pero si le das paga semanal o mensual, puedes quitarle parte de esa asignación por no trabajar bien su puntualidad. También puedes quitarle tiempo de ocio en pantallas por cada vez que llega tarde a las cases.
Si no quieres involucrar a la escuela (y que sea la escuela la que ponga consecuencias si llega tarde tu hijo a las clases), puedes decirle que pierde privilegios por cada minuto que te. Hace esperar por las mañanas. Si tienes que llevarle en coche porque pierde el autobús, aplica las consecuencias.
Deja que tu adolescente enfrente las consecuencias
Como padre o madre, es tentador llevar a tiempo a la escuela si va a llegar tarde. Si toma la responsabilidad de llevar a tu hijo a la escuela a tiempo, él no aprenderá. Si no llega a clase a tiempo quizá las consecuencias de no hacerlo sea todo lo que necesita... Si te llaman de la escuela para decirte que llega tarde, hazles saber que estás de acuerdo con las medidas que le impongan, como por ejemplo, quedarse después de que suene la campana a hacer tareas de limpieza en el aula.