Los padres siempre quieren mejor para sus hijos y la salud es lo más importante para ellos. Por eso, las personas a cargo de un niño en edad de crecimiento deben tener en cuenta que la alimentación es la base para que puedan crecer sanos y fuertes. Los alimentos adecuados ayudarán a nuestros hijos a tener los huesos con consistencia adecuada que les permitirá crecer correctamente, les hará tener la energía que necesitan para afrontar el día y, además, les harán mantenerse en su peso ideal.
Desafortunadamente, en estos tiempos los padres no tienen tanto tiempo para cocinar y algunos parecen haber descuidado la dieta de sus hijos. Sin embargo, haciendo esto ponemos en peligro el bienestar de nuestros pequeños y una mala alimentación durante la infancia puede tener efectos muy negativos tanto a corto como a largo plazo. En Bekia te contamos cuáles son los alimentos que harán que tus hijos crezcan sanos y fuertes y cuáles son aquellos que deberías evitar.
Los mejores alimentos para los niños
Para empezar el día los más pequeños de la casa deben tomar un tazón de cereales con leche. Preferiblemente aquellos cereales sin chocolate ni azúcares añadidos, pero si tienen un poco de ambos ingredientes tampoco es un gran problema. Bien es conocida la leche por ayudar a fortalecer los huesos de los niños en edad de crecimiento a la vez que es una gran fuente de calcio. Los cereales son ricos en fibra y vitaminas, por lo que este desayuno será la combinación perfecta para que el niño tenga fuerza y energía para afrontar un nuevo día en la escuela o en los juegos.
A media mañana, en el colegio, deberá comerse un bocadillo de un palmo más o menos de pan de barra o dos lonchas de pan de molde. Es preferible darle el pan de molde a los niños más pequeños a quienes les cuesta masticar o si se les han caído algunos dientes. Si no tienen problemas para comer bien, entonces es mejor el pan de barra. Con la edad la medida del bocadillo puede ir creciendo, pero ten en cuenta que si come pan por la mañana no deberá comer más en todo el día.
La alimentación infantil es un poco más flexible que la de las personas adultas, ya que los más pequeños queman más energía durante el día, pero los padres deben tener en cuenta que, como cualquier adulto, si el pequeño come en exceso engordará y eso no será adecuado para todos los niños. El sobrepeso en edad infantil es muy peligroso, puesto que no solo puede afectar al crecimiento del niño, sino que puede traerle muchas más enfermedades. Para comer, entonces, lo más adecuado es que el niño tenga una dieta equilibrada. Los padres pueden hacerse una tabla de alimentos con la cual cocinarán todos los días para que todos en casa tengan una dieta sana y equilibrada.
Así pues, para comer los niños alternarán la verdura con los carbohidratos (como la pasta y el arroz). De segundo deberán comer un trozo de carne o de pescado también alternativamente. Quizás será difícil que el niño quiera comer ciertos alimentos, pero los padres deben enseñarle que debe comer de todo y no solamente lo que le gusta. Esto no es solo para que el pequeño tenga una buena educación y no le haga ascos a nada, sino porque si no les inculcamos el hábito a comer de todo es probable que cuando crezcan sigan teniendo una dieta desequilibrada y terminen con sobrepeso u otros problemas de salud.
Por eso es tan importante la alimentación infantil. No solamente te aseguras de que tu pequeño crece sano y fuerte, sino que también le creas la costumbre de comer equilibradamente de por vida y eso tendrá muchos beneficios para él. La merienda puede ser dulce dos veces por semana, pero preferiblemente es mejor hacerle otro bocadillo pequeño (con tal de que no coma demasiado pan en todo el día) o una pieza de fruta.
Finalmente, la cena deberá ser ligera. Un poco de verdura con un trozo de pescado o quizás una tortilla con una ensalada.
Alimentos que debemos evitar
Los niños son niños y les gusta comer chocolate y otras golosinas. Como padres no podemos privarles constantemente de estas comidas en su alimentación infantil, pero sí que debemos aprender a racionárselas. Ellos no son conscientes de que este tipo de comidas son malas para su salud y su crecimiento, simplemente saben que les gustan y podrían comerlas todo el tiempo.
Hay muchos padres que, por no pelearse con sus hijos, les dejan comer solamente lo que a ellos les gusta. Otros dicen no tener tiempo para cocinar y basan la alimentación infantil de sus pequeños a base de palomitas, bollería o comidas congeladas. Desafortunadamente, la mayoría de estos niños terminan padeciendo obesidad u otros problemas de salud que podrían haberse remediado con una dieta equilibrada, como la que aconsejábamos anteriormente.
Así pues, para que los niños crezcan sanos y fuertes deben comer equilibradamente. Se les puede permitir comer chocolate, bollería y golosinas puntualmente, al igual que las bebidas gaseosas y azucaradas. Si les limitamos el acceso a estas comidas cuando los puedan comer se sentirán muy contentos y los reconocerán como un premio. A la vez serán conscientes de que estos tipos de comida no son para todos los días, sino para ocasiones especiales si quieren crecer y ser los niños más sanos y fuertes de la clase.