El Baby Led-Weaning es una práctica poco conocida que consiste en pasar a alimentar al bebé con alimentos sólidos directamente, obviando la típica introducción que se suele hacer con los purés. De esta forma, a los seis meses aproximadamente, se comienza a dar al bebé los alimentos que ya consume el resto de la familia de forma habitual. También recibe el nombre de alimentación complementaria, porque los alimentos sólidos son una complementación de la leche. Es decir, el Baby Led-Weaning consiste en que la leche, ya sea materna texto enlaceo de sustitución, continúe siendo el nutriente principal del bebé; al mismo tiempo, se le van introduciendo poco a poco todos los alimentos sólidos a los que estamos acostumbrados, para que vaya asimilándolos en su dieta.
Sí, es cierto que es una práctica poco conocida, pero cada vez se está haciendo más famosa, sobre todo entre los padres más jóvenes que buscan métodos alternativos para evitar alimentar a sus bebés con purés. Tiene sus ventajas y sus desventajas, como todo. Por un lado, es cierto que los bebés aprenden rápidamente a tratar con los sólidos, con lo cual hay pocas posibilidades de que los rechacen; pero, por otro lado, también es verdad que es un método un poco complicado para los progenitores. Los bebés no dejan de ser bebés y, al dejar que se alimenten por sí mismos, nos arriesgamos a que lo manchen absolutamente todo.
Porque el Baby Led-Weaning no consiste tan solo en introducir los sólidos poco a poco. Una parte fundamental de este método es que deben ser los propios bebés los que se alimenten a sí mismos. Nadie debe ponerle comida en la boca aparte de ellos mismos; de esta forma, se desarrolla su autonomía y evolucionan mucho más rápido. Pese a que nosotros desconfiemos de ellos, los bebés son perfectamente capaces de ver qué trozos de comida pueden digerir y cuáles no; no hay riesgo de atragantamiento, siempre y cuando la comida haya sido previamente tratada y preparada por los padres.
Pero, ¿ qué alimentos debemos comenzar a darles si nos decidimos por la técnica Baby Led-Weaning? ¿Hay alguno que debamos evitar? A estas preguntas os vamos a responder hoy, para que seáis capaces de decidir si este método se ajusta a vosotros y, de ser la respuesta afirmativa, para que sepáis cómo empezar.
Los alimentos más recomendados en el Baby Led-Weaning
Lo primero que hay que tener en cuenta es que esta técnica no debe comenzar a practicarse hasta que el niño demuestre que es totalmente capaz de mantenerse solo en posición vertical. Es decir, si el bebé no consigue mantenerse erguido, no se debe comenzar a introducir ningún tipo de sólido en su dieta; cuando comienzan a tener esa postura de forma natural es cuando ya son capaces de tragar alimentos sin atragantarse. A partir de los seis meses, más o menos, es cuando suele darse este momento.
Una vez que el bebé sea capaz de mantenerse erguido, ya no tenéis que tener miedo de que se atragante. En un principio sí es verdad que deberéis comenzar con alimentos sólidos un poco más grandes, en tiras en lugar de dados, por ejemplo. No obstante, si cortáis la comida demasiado pequeña lo único que pasará es que no podrá comérsela, puesto que no tendrá la capacidad de cogerla. Cuando los bebés tienen entre seis y ocho meses, cogen las cosas prácticamente con la mano entera; si en ese momento intentáis que cojan cosas muy pequeñas, no podrán, porque se les caerán.
Hay alimentos que los niños prefieren, como las patatas
En cuanto a las frutas, podéis probar con el aguacate cortado en forma de media luna, para que les sea más fácil agarrarlo. Una pera cortada en cuatro cuartos (o en más trozos, si es muy grande) también es muy práctica, al igual que una manzana. El melón y la sandía cortados en tiras también les gustarán mucho, pero debéis quitarle siempre antes las pepitas para evitar cualquier atragantamiento. Por otro lado, los plátanos son muy cómodos para los bebés siempre y cuando los cortéis en tercios, aproximadamente.
No son los únicos alimentos que pueden comer, ni mucho menos. La carne, como la de pollo, podéis comenzar a ofrecérsela hervida y cortada en tiras. Los macarrones cocidos serán una gozada para ellos, aunque no le pongáis un plato completo, puesto que los primeros días apenas llegarán a comer dos o tres macarrones sueltos. Las tortas, tanto de arroz como de maíz (siempre sin sal), son un buen recurso, al igual que el pan (también sin sal).
Algunos consejos a tener en cuenta
Para hacer que todo el proceso sea lo más sencillo posible, debéis tener en cuenta unos cuantos consejos o sugerencias que seguro os harán la vida mucho más fácil si habéis optado por el Baby Led-Weaning. Lo primero: no ofrezcáis más de un alimento nuevo al mismo tiempo. Id introduciéndolos poco a poco para, de esta forma, ir descartando posibles alergias. Y jamás introduzcáis vosotros un alimento en la boca del bebé; como ya hemos señalado, esto puede ser peligroso, porque no sabéis si es demasiado pequeño para él y pueda acabar atragantándose.
Para saber de qué tamaño deben ser los alimentos que les ofrezcáis, sobre todo al principio, tened en cuenta el tamaño de su puño. Lo ideal es que las tiras sean un poco más grandes que sus manos, para que puedan ir chupeteando la parte de comida que sale y, así, comiendo poco a poco. Y no os preocupéis si al principio comen menos: recordad que los sólidos son solo complementación, con lo cual toda la alimentación necesaria ya la están recibiendo de la leche.