Aunque los bebés se pasan el día tumbados y durmiendo, es necesario que también desarrollen sus pequeños músculos para que vayan cogiendo fuerza y que de este modo, les sea más sencillo su desarrollo motor. No es necesario que lleves a tu bebé a un especialista para conseguirlo, pero sí debes asegurarte de que tengas la oportunidad suficiente para fortalecer esos bracitos y que comience a desarrollar los músculos que necesita para levantarse y después arrastrarse, para finalmente... ponerse de pie y caminar.
A continuación te vamos a dar algunos consejos para que puedas ayudar a tu bebé a desarrollar músculos en sus brazos y que de esta manera, tenga más probabilidades de comenzar a moverse. Recuerda del mismo modo, que cada bebé tiene su propio ritmo y no debes forzarle a que ande o se ponga de pie si no está preparado aún para ello.
Tiempo boca abajo
Es probable que tu pediatra te haya explicado lo importante que es para el bebé pasar tiempo boca abajo. Ayuda al bebé a fortalecer los músculos de su cuello y espalda, pero también los músculos de sus brazos.
Cuando está boca abajo, aprende a levantar esos pequeños brazos para ver mejor el mundo. Desde el nacimiento, coloca al bebé boca abajo al menos dos o tres veces al día, según como recomienda la Academia Americana de Pediatría. No te preocupes, no tendrás que escuchar la protesta de tu bebé durante demasiado tiempo, de tres a cinco minutos de tiempo boca abajo por sesión es suficiente.
A medida que el bebé crece, aumenta la duración de cada sesión de tiempo boca abajo, siempre que veas que lo acepta. Si se pone nervioso o te das cuenta que no quiere, simplemente no le dejes mucho tiempo. Si crees que esa posición le causa dolor, entonces acude a tu médico para que evalúe su estado de salud.
Tiempo con juguetes
El tiempo boca abajo puede ser aburrido para los bebés, así que estimula al pequeño con libros y juguetes. Querrá levantar los brazos para tener una mejor vista de su entorno, especialmente de los coloridos juguetes e imágenes de los libros. Coloca algunos de sus juguetes y libros favoritos fuera de su alcance para motivarle a que se estire, estire los brazos y fortalezca los músculos mientras empuja hacia arriba para alcanzar lo que quiere.
Mueve sus bracitos con cuidado
Intenta trabajar los brazos del bebé con unos ejercicios simples que él disfrutará. Coloca tu dedo en las manos del bebé y deje que practique su agarre. Fortalecerá los músculos de la mano y el brazo mientras sostiene los dedos. Intenta mover las manos para que aprenda y siga. También puedes sostener las pequeñas manos del bebé y mover suavemente los brazos hacia arriba, hacia abajo y sobre el pecho del bebé.
Baila con tu bebé
Incluso a los bebés pequeños les encanta una buena melodía, y no pueden evitar moverse. Enciende tu música favorita que te haga bailar, comienza a aplaudir y jugar con el bebé.
Deja que el bebé se siente o se acueste e intenta ponerle un sonajero en la mano. Deja que la agite y mueva sus brazos al ritmo de la música; también fortalecerá los músculos de los brazos y mejorará su coordinación.
Que practique el ponerse de pie
Cuando tu bebé pueda sentarse, incluso con apoyo puedes ayudarle a practicar el ponerse de pie. Sostén las manos del bebé y tira suavemente de él para que se quede sentado y después en posición de pie. Puedes contar y decir, "arriba mi chico!" O algo similar que le haga sonreír. Pensará que es un juego divertido pero al mismo tiempo estarás reforzando sus delicados músculos de los brazos y de las piernas.
¡Además tu hijo lo pasará en grande a tu lado mientras hace grandes avances en su motricidad gruesa!