El estudio forma parte de nuestra vida diaria. Una persona comienza a estudiar desde muy joven y los estudios continúan a lo largo de la vida. Durante los primeros años, el concepto de estudio se limita a estudiar para pasar de un curso a otro. Posteriormente el concepto cambia, se amplía con la idea de adquirir conocimiento por la comprensión de los hechos. La verdadera naturaleza de examinarse y el objetivo de adquirir conocimientos cambia con el tiempo.
El objetivo de los exámenes a partir de la escuela secundaria es la comprensión de los contenidos. Durante este período académico y en años posteriores, la idea de estudiar con compañeros o amigos está más extendida y los jóvenes se benefician de sus múltiples ventajas, como por ejemplo, la estimulación que supone estudiar con los amigos.
A continuación vamos a ver los beneficios que supone estudiar o trabajar en grupo en las diferentes etapas de la vida, ya que nuestra relación con las personas de nuestro entorno cambia dependiendo con la edad.
Estudiar en grupo en primaria (de 5 a 12 años)
Cuando los niños comienzan a estudiar en grupo, suele ser como parte de una iniciativa propuesta y controlada por su profesor en la escuela. El profesor actúa como guía y apoyo para que sus alumnos desarrollen sus capacidades, y para ello debe dejarles parte del protagonismo de la clase. Para muchos niños esto supone una causa de estrés y una actividad tediosa en la que no quieren participar. Pero gracias a este tipo de actividades, los niños aprenden una serie de aptitudes que les serán útiles para el resto de su vida.
Algunas de estas aptitudes o habilidades que aprenderán durante el estudio en grupo en la escuela son las siguientes:
- Los alumnos que estudian o trabajan en equipo aprenden a transigir y a resolver pequeñas discusiones.
- Su comportamiento mejora y su progreso se acelera en muchas materias, como en matemáticas, ciencias y en la comprensión lectora.
- Aumenta su concentración y por este motivo los intercambios de ideas en el grupo se vuelven más reflexivas y fructíferas para todos los miembros del grupo.
- Los niños aprenden a ser más independientes a la vez que aprenden a trabajar en equipo.
- Los niños aprenden a comunicarse mejor, ya que deben hacer que sus compañeros entiendan lo que quieren explicarles.
Estudiar en grupo en secundaria (de 13 a 17 años)
El cambio del colegio al instituto es muy grande. Todo cambia, incluidos los objetivos. Los objetivos de los alumnos en el instituto se vuelven más ambiciosos porque, en muchos casos, sus esfuerzos irán dirigidos a conseguir acceso en el grado universitario deseado. Para ello, deben pasar las asignaturas que más les gustan, pero también las que menos. Por este motivo, los grupos de estudio resultan ideales.
La formación de un grupo de estudio entre compañeros es una estrategia muy efectiva para mejorar el aprendizaje y los resultados. Esto se debe a que los miembros del grupo se ayudan entre ellos para comprender conceptos confusos, por ejemplo. Se puede crear un grupo de estudio para hacer trabajos en equipo, para hacer presentaciones para clase o para prepararse para los exámenes.
Como en este período educativo las motivaciones cambian, vamos a ver las ventajas de estudiar con otras personas y las estrategias para hacer que ese grupo sea productivo.
Beneficios de estudiar en grupo
- Las calificaciones mejoran. Los estudiantes del grupo pueden comparar las notas obtenidas en los exámenes para estimularse y ayudarse unos a otros. Viendo los errores de los miembros del grupo la ayuda posterior será mucho más eficiente.
- Compartir talentos. Debido a que cada estudiante tiene talentos individuales e ideas únicas, los miembros pueden aprender unos de otros y ayudarse entre sí para comprender mejor las materias de estudio.
- Sistema de apoyo. El instituto puede ser bastante estresante por lo que contar con un grupo de personas en una situación similar puede ser un gran apoyo y una fuente de motivación.
- Abarcar más material. Trabajar en grupos hace posible centrarse en más conceptos ya que varias personas pueden revisar más material que una sola. Muchos grupos se reparten los temas de estudio entre sus miembros y después comparten los resúmenes que han elaborado. Esto, sin duda, hace que los estudiantes ahorren mucho tiempo en la preparación de los temas.
- Es más entretenido. Compartir las largas horas de estudio con otras personas hace que el aprendizaje sea mucho más satisfactorio y agradable. Se reduce la monotonía y el cansancio es menos patente que si se está a solas.
¿Cómo formar un grupo de estudio eficiente?
Los grupos de estudio que se forman en el instituto son muy importantes porque durante este período se establece una rutina de estudio y un método que continuará en etapas posteriores, no sólo en la universidad sino durante la futura vida laboral del estudiante. La capacidad de trabajar en equipo es una cualidad muy apreciada en cualquier empresa. Pero para comenzar, vamos a responder a unas ideas básicas para que tu grupo de estudio sea productivo:
- ¿Cuántas personas deberían integrar el grupo? Lo más recomendable es que el equipo no sea muy numeroso. Entre 4 y 6 personas sería lo ideal. En grupos grandes, la gente normalmente socializa más y pierden de vista el objetivo del grupo. En cuanto a la organización, un grupo grande es más difícil, es frecuente que haya miembros que no contribuyan tanto como otros, o que no contribuyan nada y distraigan al resto. Por tanto, en un equipo de entre 4 y 6 personas, se minimiza la socialización y se maximiza la contribución individual.
- ¿Quién debe formar parte del grupo? Es deseable que todos los miembros compartan el mismo objetivo de sacar buenas notas. Los estudiantes que tienen como objetivo destacar por sus notas normalmente completan las tareas que le son asignadas, toman buenos apuntes, hacen resúmenes más completos y eliminan cualquier confusión que tengan haciendo preguntas y contribuyendo activamente en el grupo.
- ¿Dónde debe reunirse el grupo de estudio? Lo mejor es buscar un entorno de estudio sin distracciones y en donde los miembros puedan comunicarse libremente. Muchas bibliotecas tienen salas que pueden ser reservadas por grupos y así se evita molestar al resto de usuarios de la biblioteca.
- ¿Cuánto debe durar una sesión de estudio? Es recomendable no realizar sesiones de estudio de más de 2 o 3 horas. En sesiones demasiado largas, los miembros del grupo tienden a distraerse más, y a socializar saliendo del tema de estudio, por lo que la productividad disminuye notablemente. Por el contrario, las sesiones del estudio de una hora o menos tampoco son productivas porque no se pueden tratar demasiados temas y se tiende a hacer las cosas más deprisa de lo recomendable.
- ¿Cuándo planificar las sesiones de estudio? Si vuestra idea es quedar regularmente, lo mejor es organizar las sesiones siempre en el mismo lugar y a la misma hora. De esta manera, los miembros pueden organizarse con sus otras actividades para poder preparar las sesiones de estudio sin problemas.
Estrategias para mejorar el rendimiento de tu grupo de estudio
- Cread objetivos claros. Antes de cada sesión, los miembros del grupo deberían hablar sobre lo que esperan conseguir en la siguiente sesión de estudio en grupo, de esta manera, la sesión será mucho más productiva porque se buscará cumplir los objetivos establecidos.
- Preparad la sesión. Si los miembros no se preparan las sesiones de manera individual, la eficiencia del grupo se pierde. Cada miembro debe prepararse la sesión para que el grupo siga adelante sin retrasos.
- Participad activamente. Todos los miembros deberían ser activos. Repartir las tareas es la mejor manera para hacer que todos los miembros realicen aportaciones al equipo. Esto obliga a los miembros a ser más críticos y constructivos, para que las aportaciones sean significativas y provechosas para los compañeros y para uno mismo. Esto sin duda beneficiará a la creatividad personal de cada miembro, porque se tratarán diferentes puntos de vista que de otra manera no se habrían tomado en consideración.
- Conservad la concentración. Una buena opción es establecer un "jefe" diferente para cada sesión. La persona encargada de dirigir al grupo en una sesión debe asegurarse de que la jornada sea productiva, esto quiere decir, que no se salga de la línea de estudio establecida y se asegure de que se traten todos los temas planificados previamente. La persona responsable de gestionar la sesión debe programar también descansos para que el rendimiento de los miembros no disminuya.
Conclusiones
En general, estudiar en grupo proporciona una serie de beneficios comunes en todas las edades. Por este motivo, deberías tener en consideración incluir este método de estudio si tienes que preparar pruebas importantes. Vamos a ver estos beneficios generales:
- Adiós a la procrastinación. Efectivamente, estudiar a solas tiene sus ventajas, pero su mayor inconveniente es que se dispersa la mente con más facilidad y se tiende a procrastinar. Estudiando en equipo tienes compañeros que te motivan y obligan a cumplir con unos plazos. La responsabilidad que se siente para no fallar a un grupo es más importante que la que se siente para no fallarse a uno mismo.
- El compañerismo te hace aprender más rápido. Si estás estudiando y llegas a un punto determinado que no comprendes bien, probablemente alguien de tu grupo podrá explicártelo. Sin duda, la tranquilidad que ofrece el estudiar con otras personas reduce mucho del estrés que podrías sufrir estudiando a solas.
- Rellena lagunas. Si en clase has tomado apuntes que no están muy claros o están incompletos, puedes compararlos con los de tus compañeros de estudio. De esta manera, os podéis ayudar a completar vuestras notas y a clarificar conceptos que no hayan quedado claros a través de los apuntes de clase.
- Perfecciona tus habilidades de estudio. Formar parte de un grupo te permite observar cómo estudian otras personas y qué técnicas utilizan. Esos métodos de estudio pueden ser buenos para ti y puedes incorporarlos a tus sesiones de estudio en solitario. Así, tus habilidades y tus resultados mejorarán notablemente.
- Estudiar solo está bien, ¡pero es muy aburrido!. En efecto, la monotonía de estudiar a solas puede llegar a ser desesperante, así que rompe esa monotonía buscando un grupo de estudio. Socializar es bueno para el cerebro, así que aunque en un principio pienses que es una pérdida de tiempo, al final te darás cuenta de cuánto mejora tu rendimiento por el simple hecho de compartir unas horas con otras personas.
- Es una práctica para el "Mundo Real". Las dinámicas de los grupos de estudio son muy parecidas a los trabajos en equipo que ofrecen las empresas, por lo que esta rutina la podrás aprovechar cuando te introduzcas en el mundo laboral. Estudiar en grupo te da la oportunidad de perfeccionar habilidades sociales y colaborativas, dos habilidades fundamentales para ese conocido "Mundo Real" del que hablan los más mayores.