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10 claves para controlar la ira en niños pequeños
10 claves para controlar la ira en niños pequeños

IRA

10 claves para controlar la ira en niños pequeños

Los niños pueden tener ira por culpa de enfados o frustraciones, es clave que los padres sepan algunas estrategias para ayudar a entender y controlar estas emociones.

La RAE define irá como: "Sentimiento de indignación que causa enojo". En niños este sentimiento les produce que se sientan enfadados, irritados ante algún suceso o situación que no les gusta. Este sentimiento de enojo puede manifestarse de muchas formas, algunas internas como la aceleración del ritmo cardíaco, la presión sanguínea, y otras formas más externas como gritar, llorar, lanzar cosas, insultar o incluso llegar a pegar.

Aunque son impulsos, se puede trabajar con ellos para que aprendan a canalizar la ira y poder comportarse correctamente ante las diferentes situaciones que pueden no gustarle. A continuación, te proponemos diez formas o métodos para que los niños puedan manejar su ira y comportarse bien.

En algunas ocasiones los niños actúan de forma violenta porque no saben como actuar ante las situaciones que no le gustanEn algunas ocasiones los niños actúan de forma violenta porque no saben como actuar ante las situaciones que no le gustan

1.Mantener la calma

En primer lugar, no debemos perder los nervios al verlos así, intentaremos hacerle ver que ese no es el camino correcto y que si quiere conseguir su objetivo debe dirigirse hacia nosotros o a los demás con respeto y tranquilidad. En ningún caso elevaremos la voz o nos mostraremos "agresivos".

2.Liberar la tensión

Para conseguir que el niño no este estresado y pueda relajarse pensando en positivo, el deporte puede ser una buena forma de canalizar sus frustraciones. Puede ser el deporte que más le guste, si es en grupo el niño aprenderá a relacionarse con los demás y esto será muy positivo.

3.Enséñalo a reconocer el problema

Cuando el niño esté enfadado será difícil poder hacerle razonar, pero cuando se muestre más calmado podréis hablar de ello. Intenta que él te explique que le sucede y por qué actúo de esa forma.

4.Enséñalo a actuar ante la ira

En algunas ocasiones los niños actúan de forma violenta porque no saben como actuar ante las situaciones que no le gustan. Muéstrale cuál puede ser la solución, identifica el problema y aporta soluciones, siempre de una forma tranquila, sin gritos y con paciencia. Es importante que, si consigue hacerlo bien, refuerces el comportamiento, haciéndole ver que ese es el camino correcto.

5.Ayúdalo a expresar su ira

Si tu hijo tiene por costumbre romper o gritar, dale más posibilidades. La escritura le puede servir para manifestar lo que siente y a ti, para saber cómo puedes actuar en el futuro. También puede dibujar, asimismo te dará pistas.

6.Autocontrol

Debes explicarle qué es el autocontrol, y saber que todas estas técnicas te llevaran tiempo, no conseguirás que tu hijo cambie su comportamiento en un rato. Hazle entender que si las cosas no son siempre como el quiere, no puede enfadarse y gritar o romper cosas. Una técnica bastante conocida es el volcán, consiste en hacerle entender cuando está a punto de comportarse de una forma inadecuada y poder corregir el comportamiento a tiempo. Dile que se imagine como si él fuera el volcán y pudiera explotar. El niño entenderá las señales que le producen ira y enfado, como si fuera lava, esto hará que pueda interpretar su frustración como la lava y corregirse.

7.Empatizar

Tanto el niño como tú debéis poneros en el lugar del otro, hazle ver como te sientes cuando el se comportar de una mala manera y viceversa. Esto será fundamental para conseguir que entienda lo que ven los demás cuando se muestra agresivo.

Si un niño está descansado podrá analizar mejor la situaciónSi un niño está descansado podrá analizar mejor la situación

8.Música

Aquel refrán de que la música amansa a las fieras puede cobrar sentido. La música en determinados momentos puede relajar y desestresar, no tiene por qué ser música clásica, sino aquel estilo que más le guste.

9.Descansar lo suficiente

Esto que a priori puede parecer lógico es muy importante, el descanso en un niño hará que se muestre más activo y con ganas de realizar actividades. Si un niño está descansado podrá analizar mejor la situación y aplicar aquellos métodos que hayas trabajado con él.

10.Terapia con un psicólogo

Acudir a un profesional siempre le ayudará, la terapia psicológica para el cambio de actitudes puede ser la solución definitiva a los problemas de comportamiento de tu hijo, si tus intentos han fallado. Le enseñará nuevas técnicas de control emocional.

Como has podido ver hay muchas formas de ayudar a tu pequeño a controlar su irá, siempre con buenas formas y paciencia los padres podrán inculcar formas y maneras de actuar. ¡Vivan los niños!

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