La cesárea es una de las intervenciones quirúrgicas que con más frecuencia se realizan a la mujer. De hecho, se calcula que dos de cada diez partos son por cesárea. Es una alternativa que intenta evitarse en la medida de lo posible ya que conlleva más peligro tanto para la madre como para el bebé. La recuperación también lleva mucho más tiempo, antes la mujer debía reposar en maternidad al menos durante una semana, ahora el tiempo se ha reducido a apenas 3 o 4 días, sin embargo, los cuidados deben seguir en casa.
Antiguamente la cesárea se hacia de forma vertical (cesárea infraumbilical) dónde la cicatriz era muy evidente. Ahora los médicos siempre que pueden la hacen por debajo de la línea del bikini y horizontal (cesárea transversa de Pfannensteil), por estética más que nada. Si todo sale bien, es decir, no hay infecciones, hemorragias ni la cicatriz se abre, apenas quedará una marca horizontal por encima del pubis que puede camuflarse fácilmente bajo la ropa interior. El cierre se realiza con puntos o grapas, ambos tienen buen resultado y no hay mucha diferencia entre la marca que dejan.
¿Qué cuidados debemos seguir para cuidar la cicatriz de la cesárea?
1. Antes del parto. Si te han dado una fecha para la cesárea has tenido buena suerte porque puedes ir cuidándote la zona de antemano, así irás prevenida y facilitarás la cicatrización de la zona. ¿Cómo? Para empezar sigue una nutrición rica en alimentos de calidad. Huye de los precocinados y comida rápida. Elige alimentos que contengan proteínas de alta calidad como pescados y carne magra, frutas y verduras que aporten vitaminas y antioxidantes, además debes beber mucha agua. Piensa que debes estar hidratada para que tu piel sea más elástica y la recuperación sea más sencilla. De la misma manera empieza a aplicarte al menos una semana antes crema hidratante en la zona mediante masajes concéntricos.
2- Cuida los puntos. Después de la cesárea tocará cuidarse adecuadamene los puntos. En el hospital es el médico el que evaluará si tu herida progresa adecuadamente, es decir, si se ha cerrado, te duele menos al pasar los dedos por encima... Durante un par de días no te quitarán el apósito pero pasado ese tiempo suelen retirarlo con precaución dejando la herida en contacto con el aire. Sin embargo, no siempre es así y a veces la mujer llega con el apósito a casa después del parto. Si ese es el caso puedes bañarte con él puesto siempre que después lo seques adecuadamente. Si se te cae solo y ves que la herida no tiene mal aspecto ni te duele no vuelvas a colocarlo. En caso contrario visita al médico.
3. Lavar la cicatriz. Ya en casa tras el parto deberás lavar la herida con agua y jabón regularmente, el jabón tiene que ser neutro. Cuando te estés bañando quita suavemente las pequeñas costras que se forman, según las indicaciones que previamente te dio el médico, debes hacerlo con cuidado pero tampoco te dejes intimidar por la herida. A la hora de secarse tienes que hacerlo mediante pequeños golpecitos con la toalla, sin frotar o restregar.
4. Sobre el octavo día tras la cesárea suelen quitarse los vendajes dejándola ya al descubierto. En el caso de que notases dolor en los puntos cuando antes no lo sentías acude al médico porque podrías estar teniendo una infección y tal vez necesites tomar antibióticos.
5. Si la herida vuelve a abrirse también tendrás que acudir al médico porque una vez cerrada es raro que esto ocurra a no ser que haya infección o la técnica quirúrgica usada durante la cesárea no fuese la correcta.
6. ¿Utilizo una faja de contención abdominal? Es una buena alternativa si te sientes demasiado expuesta, gracias a ella el dolor será menor, sin embargo, tapoco deberías usarla continuamente porque al fin y al cabo el dolor es una señal que el cuerpo nos hace para que reposemos y bajemos el nivel de vida. Al mitigar el dolor con la faja podemos tener la falsa sensación de encontrarnos mejor y no tomar las medidas necesarias para que la herida se cure totalmente. Hasta el medio año es totalmente normal no recuperar totalmente la sensibilidad de la zona.
Como mejorar estéticamente la cicatriz de la cesárea
- Las dos primeras semanas sigue los consejos médicos que suelen darse específicamente a la embarazada tras el parto. Consejos sobre como limpiarla, que hacer con las vendas, etc.
- Una vez que se hayan caído los puntos o nos los hayan retirado, deberemos hidratar al zona mediante masajes circulares, te vale prácticamente cualquier hidratante pero una de las más usadas es el aceite de rosa mosqueta o de aloe vera por sus propiedades cicatrizantes. Si mantenemos esta zona cuidada evitaremos que se puedan formar quiloides, son zonas alrededor de la herida hipertrofiadas, el tejido crece de forma anormal y se engrosa, dando un mal aspecto. También puede doler o picar en algunas personas, es realmente difícil de controlar porque dependerá de la forma que tenga tu cuerpo en cicatrizar, interviene un componente genético.
- No expongas la cicatriz al sol el primer medio año para que no cambie la tonalidad de la cicatriz y sea más evidente. Una buena opción para evitar rojeces y estar más cómoda en verano es el uso de parches de silicona. Reblandece la cicatriz y previene las rojeces.
- Viste de forma fresca y con tejidos de algodón evitando la licra. Buscamos que la herida pueda transpirar para evitar la acumulación de bacterias en la zona (el calor es el medio perfecto para su reproducción).
- ¿Te sigue doliendo a zona? Puede que tengas los llamados dolores de entuertos, son unos calambres que se tienen alrededor de al cicatriz tras la cesárea como consecuencia de que el útero está contrayéndose para volver a su tamaño original y tras el parto por cesárea está más sensible. En ese caso se recomienda antiinflamatorios pero siempre bajo recomendación del médico y nunca por tu cuenta.
- Tratamientos quirúrgicos. Por último, si por los motivos que sean (infección, ensanchamiento, quiloides...) estás muy acomplejada con la cicatriz de la cesárea puedes someterte a cirugía para reducir posibles quiloides que se hayan formado. Nunca se podrá eliminar del todo pero si disimularla convirtiéndola en una línea delgada.