Para que los niños aprendan a valorar a los demás es necesario enseñarles empatía. La empatía es una de esas cualidades extrañas que todo el mundo quiere tener pero que pocos saben cómo darlo o recibirlo correctamente. Estamos en una sociedad cada vez más individualista y es primordial enseñar a los niños empatía para poder reconducir esta sociedad y que el futuro no sea tan oscuro en cuanto a emociones sociales.
¿Qué es empatía?
Muchas personas confunden simpatía y empatía, pero son dos valores distintos. La empatía no es solo la capacidad de comprender los sentimientos de alguien; los delincuentes a menudo se aprovechan de las personas que comprenden sus sentimientos y, posteriormente, ganarse su confianza para después aprovecharse de ellos en su beneficio.
La empatía es más que eso. No solo es la capacidad de reconocer cómo se siente alguien, sino también el respetar esos sentimientos y darles un valor. Significa también tratar a los demás con amabilidad, dignidad y comprensión.
Cómo enseñar a los niños a valorar a los demás
Los adultos son el ejemplo de los niños
Hay niños que tienen un gran corazón de forma natural, pero en la mayoría de los casos, los niños necesitan aprender de los adultos qué es la empatía y cómo los adultos se valoran entre ellos. Todo comienza en la forma en que los padres se relacionan con sus hijos.
Los padres que muestran interés en las cosas que les importan a sus hijos y responden a las emociones de una manera positiva y afectuosa están enseñando la habilidad de la empatía. Es muy importante que los niños vean cómo sus padres son capaces de ponerse en los zapatos de las personas que tienen a su alrededor y que entienden los sentimientos de otras personas.
Reconocer las necesidades emocionales
Cuando los niños satisfacen sus necesidades emocionales suceden dos cosas:
-Aprenden a satisfacer las necesidades emocionales de los demás
-Se sienten seguros para dar a los demás siempre que surja una necesidad
Pero para poder mostrar empatía hacia los demás, primero necesitan sentir cómo los demás (sus padres sobre todo) muestran empatía con ellos. Una jarra vacía no llenará jamás una taza.
Hablar con los niños sobre las necesidades emocionales
A muchos adultos les resulta difícil hablar sobre necesidades emocionales o cualquier cosa relacionada con las emociones. En consecuencia, pasan su vida de puntillas alrededor del tema de las emociones. Estas son personas que no saben cómo manejar las emociones de los demás y se sienten incómodas con cualquier situación que requiera una respuesta emocional. A veces tienen miedo de sus propias emociones porque nunca aprendieron a lidiar con las necesidades emocionales.
Es una buena idea hablar con los niños sobre las emociones y cómo otras personas las experimentan. Ponle nombres a las emociones que sienten tus hijos (por ejemplo, celos, enfado y amor) y enséñales que son normales. Todas las emociones son normales y necesarias en las personas. Es importante que les enseñes a entender que lo importante es controlar las emociones de una forma positiva y entender que ellas, son las encargadas de decirnos si las cosas van bien o no en nuestra vida. Si algo nos hace sentir mal, debemos buscar qué es para encontrar una solución, pasar a la acción y entonces, sentimos mejor.
Cuando un niño se siente valorado, comprendido y que los demás sienten empatía con ellos, será entonces cuando esos niños estén preparados para poder valorar a los demás. En este sentido, resulta primordial que todos los padres y todas las madres del mundo trabajen la empatía con los niños desde edades bien tempranas.
Si sientes que te cuesta entender las emociones o inculcarlas a tus hijos, no dudes en pedir ayuda a un profesional para que te oriente y te guíe en el proceso del entendimiento de las emociones propias y ajenas.