Para potenciar una autoestima saludable en los niños es necesario que se logre un equilibrio. Como padre o madre, puedes estar constantemente preocupado por si estás haciendo un buen trabajo en la crianza de tus hijos. ¿Les estás enseñando una buena educación? ¿Estás siendo un buen ejemplo en los valores que quieres transmitirles? ¿Te aseguras cada día de que reciben el amor y la atención que necesitan?
Pero la pregunta que más importa es: ¿le estás enseñando a tener suficiente amor por sí mismos para que su autoestima esté equilibrada y sepa lo que vale él mismo? Estas preguntas son normales y probablemente te la hagas cada día. Cuando se trata de desarrollar la autoestima e un niño, puedes sentir que se trata de una tarea frágil y realmente delicada.
Es necesario que te asegures de que tu hijo/a crece teniendo respeto hacia sí mismo, amor propio y criterio ante la vida... Pero todo esto, sin que llegue a ser arrogante. Pueden saber todo lo que valen sin necesidad de ser déspotas o de que se sientan superiores a los demás.
La mejor forma de ayudar a tus hijos a tener una autoestima saludable
Es posible que no sepas si elogiar constantemente sea una buena opción, o si es mejor reservar el elogio a tus hijos solo en algunas situaciones. ¿Hay que premiar su comportamiento o ignorarlo? ¿Dónde está el equilibrio para poder potenciar una buena autoestima? Para que tus hijos sepan que les amas con todo tu corazón, los elogios deberán estar presente en vuestras vidas.
Hay diversos enfoques para desarrollar y mitigar el sentido de sí mismo en los niños. Una gran parte reside en asegurarse de que cuando elogias es por algo específico. Que tus hijos no se conformen con metas bajas ni tampoco elogiarles por cualquier cosa en cualquier momento, porque entonces, las palabras perderán el valor que tienen y todo su potencial.
Si alabas a tus hijos por cosas que no son dignas de alabar, lo que estarás haciendo realmente es potenciar su baja autoestima. Los niños deben tener objetivos constructivos. Deben saber que deben esforzarse para conseguir metas que valen la pena.
Por supuesto, esto no significa que debas empujar a tu hijo a realizar tareas muy complicadas o a seguir extremos irracionales. Tendrás que asegurarte de que tengan bien claro cuáles son sus objetivos y que es un objetivo saludable, alcanzable. Deben saber cuáles son sus límites y qué es lo que pueden lograr y lo que no.
Como padre o madre tienes un papel activo
Hay otras técnicas y habilidades que como padre o madre debes aprender para ayudar a tu hijo a tener una mayor autoestima sin desarrollar demasiado su ego. De la misma forma, puedes asegurarte de que su autoestima no decaiga porque se conforma con poco cuando realmente puede hacerlo mucho mejor.
Es importante resaltar aquellas facetas que los niños dominan o que se les da mejor para que vean que son capaces de lograr sus objetivos. El trabajo constante es el que permite tener buenos resultados, porque sin esfuerzo no hay gloria.
En este sentido, los padres deben alentar a sus hijos a que sean capaces de conseguir buenos resultados, pero siempre teniendo como punto de partida las capacidades de sus hijos. No hay que intentar que los niños hagan cosas que no están preparados para realizar, porque entonces aparecerá la frustración y la desmotivación en escena. Lo ideal es empezar con pequeñas metas alcanzables e ir aumentando la dificultad y las metas a medida que se vayan consiguiendo. Ayuda a tu hijo a organizar estas metas con una agenda o calendario mensual.
Una vez que tengas todo esto claro, podrás ayudar a tus hijos a tener una autoestima más saludable y que sean capaces de saber todo lo que valen sin que se conviertan en personas arrogantes.