Con un nuevo bebé a cuestas, el tiempo para correr será tu mayor desafío, pero si te comprometes a hacerlo, pronto obtendrás las recompensas. Está claro que la recuperación y el cuidado postparto son fundamentales, pero si te gusta correr te vamos a dar algunos consejos para que seas capaz de pasar de la recuperación postparto a volver a ser una buena corredora.
Primero tienes que recuperarte
Ya sea que haya tenido un parto vaginal o una cesárea, tu cuerpo ha pasado por mucho y necesita tiempo para recuperarse. Cuanto más tiempo te dediques a recuperarte, más listo estarás para que pueda volver a entrenar. Asegúrate de obtener el visto bueno de tu médico también, antes de comenzar a correr.
Establecer un objetivo realista
Correr una maratón como tu primer objetivo simplemente no es realista. Tienes que darte tiempo para llegar a eso. Además de la falta de sueño con la que estás lidiando, tu tiempo ya no es tuyo, por lo que el tiempo de entrenamiento se reduce considerablemente. Trata de no ver esto como algo negativo, sino más bien como una oportunidad para establecer un nuevo objetivo. ¿Cuándo fue la última vez que corriste una carrera de cinco kilómetros? Una meta pequeña como esta puede sentar las bases para correr una gran maratón cuando tengas más tiempo y te encuentres mejor.
Desarrolla un núcleo fuerte
A lo largo de tu embarazo, tus músculos pélvicos se habrán expandido y habrán estado bajo una carga mayor. Debes recuperarlos nuevamente, no solo para prevenir afecciones como la diástasis abdominal o de recto, sino también para prevenir lesiones en otros lugares. Después de todo, el núcleo es fundamental para tu movimiento de carrera, por lo que la debilidad aquí puede afectar a todo lo demás.
Sigue un plan
Este plan debe ser estructurado y progresivo. No siempre podrás entrenar el mismo día, así que planea hacer tres sesiones por semana, cada vez que pueda integrarlos. Mantén tus kilómetros de entrenamiento bajo pero regular y frecuente: especialmente cuando regreses por primera vez al entrenamiento. En lugar de correr / caminar una sesión de 2 km que intentar volver directamente a una carrera de 10 km dos veces por semana. Hacer las cosas de esta manera te ayudará a mejorar más rápido y evitar lesiones.
Centrarse en correr de forma más fácil
Las carreras sencillas en las que puedes hablar y correr al mismo tiempo fortalecerán tu sistema de energía de resistencia sin dañar demasiado tu cuerpo. Cuando comiences a correr de nuevo, comienza con el entrenamiento de intervalos, como caminar durante tres minutos y trotar durante un minuto. La semana siguiente puedes hacer dos minutos de caminata y dos minutos de trote, y así sucesivamente, hasta que vuelvas a correr con normalidad... ¡sin prisa pero sin pausa!
Descansa y recupérate
El cuerpo se repara a sí mismo y se recupera durante el descanso, si colocas la carga de entrenamiento correcta sobre él. Sin embargo, con un nuevo bebé no podrás dormir tranquilamente ocho horas por noche, lo que significa que la recuperación del ejercicio llevará más tiempo porque dormir será más importante que correr. Asegúrate de que te das suficiente tiempo de recuperación después de cada día de ejercicio.
Con estos consejos, estarás bien encaminada para ponerte en forma y ser fuerte después del nacimiento de tu bebé, junto con una serie de otros beneficios. Tendrás una gran sensación de realización personal al final de cada carrera, y cuando te sientas estresada por el motivo que sea, salir a correr será como una liberación para ti. El tiempo para correr es tu mayor desafío siendo madre reciente, pero si te comprometes de verdad a hacerlo, es seguro que podrás conseguirlo.