Dicen que la adolescencia es el momento más feliz de la vida, porque es cuando un joven descubre quién es y a pesar de sus obligaciones escolares disfruta junto con sus amigos de emociones y aventuras únicas que no se repetirán. Pero, como todo en esta vida, todo lo bueno lleva consigo su lado malo, y es que la adolescencia es también una época en la que los cambios vienen de manera masiva y agrupada. No es fácil lidiar con todas las novedades que nos aporta la adolescencia, y de hecho a muchas personas esta etapa de la vida le provoca tanta incertidumbre, que acaban en depresión.
Las estadísticas lo explican...
Más o menos, ocho de cada cien adolescentes van a caer en depresión a lo largo de esta etapa de la vida, en Estados Unidos. En España, entre un 3,4 y un 4% de los adolescentes tendrán depresión. Sin embargo, es sabido que la depresión afecta más a las mujeres que a los hombres, y el caso de la adolescencia no es excepción: así, sólo un 4,6% de los adolescentes sufrirá depresión, mientras que un 13% de las adolescentes lo padecerá.
Cómo identificar la depresión en un adolescente
Todos los que hemos vivido la adolescencia sabemos lo que sucede. Cambios excesivamente bruscos en nuestro estado de ánimo y humor; reír por teléfono un minuto y llorar diez minutos después... Sin embargo, es esencial saber cómo identificar cuándo un adolescente está sufriendo de depresión, porque padecer esta enfermedad no sucede sólo con una tristeza momentánea o poco duradera, sino más bien cuando impide al adolescente llevar un estilo de vida normal, y realizar sus actividades cotidianas o escolares. Puesto que una depresión, si bien es muy dolorosa, tiene una solución relativamente fácil siempre y cuando sea identificada y tratada, es muy importante que los padres acudan a los profesionales si sospechan de que su hijo está sufriendo esta enfermedad mental, porque el término 'depresión' se utiliza con mucha facilidad, cuando realmente es una enfermedad grave que afecta a la salud mental y que requiere terapia para ser solucionada.
Causas de la depresión durante la juventud: genéticas o de entorno
Las razones por las cuales un joven puede caer en depresión son varias, y no es fácil identificar la causa exacta de esta enfermedad mental, si bien la psicología y psiquiatría ayudan a identificarlas. Sin embargo, existen varias causas generales que podrían ayudar a orientarnos para entender por qué un adolescente en particular puede sufrir de depresión. Debido a que esta enfermedad es genética, en el caso de que miembros de la familia hayan padecido depresión, es más probable que esa persona sufra esta enfermedad durante su juventud: sería más probable, que si ni sus padres ni sus abuelos hubiesen tenido nunca depresión.
Por supuesto, no es sólo la genética la que determina que alguien vaya a tener o no depresión. El entorno también juega un papel fundamental, pues una ruptura sentimental durante la adolescencia o cambios bruscos tales como el divorcio de los padres o tener que mudarse de una ciudad o país a otro, podrían acarrear una enfermedad mental caracterizada por la tristeza y la impotencia, como es la depresión. Este tipo de cambios impactantes, que modifican el estilo de vida, pueden ser la razón de una etapa depresiva durante la adolescencia.
Otros sucesos en el entorno pueden provocar una depresión, como por ejemplo la muerte de un familiar o amigo, o problemas de salud. Los problemas familiares o discusiones frecuentes entre los padres también pueden suponer un motivo importante.
La muerte de un amigo o familiar, problemas familiares y de salud pueden provocar una depresión
Elena Mató, Especialista en Psicología Clínica, indica en Mapfre otros síntomas de depresión, tales como leer libros o escuchar música de temática triste y sobre la falta de sentido de la vida. Una notable dejadez a la hora de cuidarse de uno mismo también puede ser síntoma de depresión, especialmente durante la juventud, cuando es más habitual preocuparse por el aspecto. Dificultades a la hora de tomar decisiones o de solucionar problemas, también pueden ser comunes cuando un adolescente tiene depresión.
La adolescencia viene con el descubrimiento de quién es uno mismo, y viene también con el proceso de la maduración y de obtener una relativa independencia. Muchos adolescentes viven este tipo de cambios con estrés y, en el caso de que el estrés se haga insoportable, llega la depresión.
Los síntomas de la depresión
Para saber reconocer si un adolescente sufre de depresión, o si solamente se trata de cambios de humor propios de la juventud, primero tenemos que identificar cuáles son los síntomas propios de esta enfermedad mental. Cuando un adolescente tiene depresión, va a sentir apatía. No va a querer realizar aquellas actividades cotidianas que antes le alegraban, y sentirá tanto cansancio, y tanta falta de energía, que apenas podrá realizar las actividades que solía hacer. No podrá concentrarse, y esto se notará sobre todo en sus notas de clase: bajarán.
El apetito va a cambiar notablemente con este trastorno: comerá por demás, o comerá mucho menos de lo que solía comer en el día a día. Lo más común, sin embargo, es que pierda el apetito. Un adolescente deprimido, al igual que cualquier adulto o niño en depresión, va a adoptar una actitud sobre todo pesimista, que estará presente durante todo el día. Mostrará emociones de ira o de tristeza, y tendrá dificultades para conciliar el sueño.
Puede que se distancie de sus amigos así como también de sus padres y del resto de la familia, aunque respecto a este último caso tenemos que tener en cuenta que los adolescentes por lo general suelen estar más separados de sus padres en comparación con cómo era su relación con la familia durante la infancia, cuando se sentían dependientes. Ahora, al sentirse más independientes, es normal que se alejen de la familia, así que este síntoma por sí solo nunca puede determinar la presencia de una depresión.
Un adulto puede recurrir al alcohol y a otras drogas cuando sufre de depresión, y el caso de un adolescente no es excepción, sobre todo porque está viviendo una etapa de vida en la que se verá rodeado de este tipo de sustancias, al pasar mucho tiempo con otras personas de su misma edad. Pero, en el caso de recurrir al alcohol y a otras drogas no por 'encajar' sino porque, al consumirlas, alivia su tristeza momentáneamente, este puede ser un síntoma de trastorno depresivo.
Consumir alcohol es aún más perjudicial para las personas con depresión
Desgraciadamente, muchas personas que padecen el trastorno de la depresión terminan con su tristeza interior recurriendo al suicidio, y por esta razón es fundamental y totalmente imprescindible que la persona que note que alguien a su alrededor padece depresión, recurra a los profesionales para ayudarle lo más rápido posible. Sobre todo, la ayuda deberá ser inmediata en el caso de que un adolescente reparta sus pertenencias entre las personas que conoce, se despida de sus seres queridos, hable o escriba sobre el suicidio, cambie de personalidad radicalmente, se atreva con riesgos excesivos o quiera estar completamente solo, como nos indica Medline Plus.
La depresión no es un problema que se pueda tomar a la ligera, porque afecta a la salud mental y su gravedad es innegable. Tenemos que ser conscientes de que, detectada y tratada a tiempo con la ayuda de profesionales de la psicología o psiquiatría, se podrá sustituir por un estilo de vida plenamente normal y feliz.
Qué hacer cuando un adolescente tiene depresión
Nunca, bajo ningún concepto, es aceptable hacerle a un joven que sufre depresión comentarios tales como "tienes muchas razones por las cuales ser feliz", "se te pasará, lo que sientes no es grave" o "levanta ese ánimo, que no tienes razones para estar triste". Ni mucho menos criticar su pérdida de peso en el caso de que haya perdido varios kilos debido a la falta de apetito, o calificarle como "soso" u otras críticas, por estar completamente desganado. Al igual que las demás enfermedades mentales, la depresión no es algo que pueda controlar el paciente. Lo importante es animarle, escucharle siempre que se sienta con ganas de hablar sobre lo que siente o piensa, y hacerle ver que siempre estaremos ahí cuando nos necesite. Siempre es fundamental que una persona deprimida se sienta apoyada y arropada por quienes le rodean.
Elena Mató también recomienda mostrarse interesado por la vida de un adolescente que tiene depresión, así como también nunca ignorar un comentario o deseo relacionado con la muerte.
Las personas con depresión necesitan que quienes están a su alrededor les apoyen
GuiaSalud.es indica que el médico de atención primaria será el primer profesional en vigilar este trastorno, si bien, en el caso de que sea necesario, este médico puede referir al adolescente a un especialista en salud mental. Los profesionales de la psicología y de la psiquiatría pueden ayudar enormemente en este tipo de enfermedades de salud mental. Debido a que la causa más común del suicidio es una depresión no tratada, en el caso de que un adolescente presente riesgos, es importante tener en cuenta los siguientes números de contacto y páginas web:
Teléfono de urgencias: 061 ó 112
Teléfono de la esperanza (trabajan las 24 horas): www.telefonodelaesperanza.org.
www.suicidioprevencion.com