Incluso aunque tu pareja se haya roto por temas delicados, si tienes hijos, merece la pena poner un poco de tu parte para que los niños no sientan cómo su familia está totalmente destrozada . Una idea es mantearse cerca del ex para que los niños puedan estar cerca de los dos padres, aunque esta idea quizá no funcione para todos, porque estar cerca significa estarlo tanto a nivel físico como emocional.
En realidad, puede no ser cómodo para los padres, pero es necesario para los hijos, de otra manera es posible que sientan que uno de los progenitores está demasiado alejado de sus vidas, algo que sin duda, puede afectar a su desarrollo emocional. Es importante conocer algunas estrategias para que si tienes pensado divorciarte, al menos no destroces el sentimiento de familia que tiene tu hijo.
El divorcio y los niños son cosas diferentes
Las personas con las que nos casamos no son las personas con las que nos divorciamos, porque las personas cambian... pero se es padre o madre toda la vida. Aunque una pareja se rompa y se divorcien, es importante que como padres se centren en lo que realmente importa: respetarse mutuamente y mantener las cosas estables por el bien de los hijos.
Las personas se divorcian con la esperanza de obtener algo de justicia emocional. El divorcio es un proceso de transición, va a crear agitación en toda la familia y también en los niños. Es importante poder regular las emociones y comprender los propios factores desencadenantes. Permitir que el enfado, el dolor, la traición y la tristeza se interpongan puede hacer que el divorcio se intensifique y que cueste mucho más a nivel económico, pero también a nivel emocional.
Primero piensa en los niños y después en tu dinero
Es importante resolver los problemas relacionados con los niños, como quién tendrá la custodia legal y física, lo más rápido posible. Tus hijos son los seres que más amas en el planeta y por eso, debes comportarte acorde a eso, independientemente de las circunstancias en las que te encuentres. Si ambos padres saben cuándo van a ver a sus hijos y tienen voz en sus vidas, es más fácil lidiar con los temas de dinero.
La custodia legal cubre quién tomará las decisiones importantes con respecto a la atención médica y la educación; y la custodia física (o residencial) cubre dónde se alojarán los niños, y cuándo. Un padre puede tener custodia completa o compartida. Los horarios de los niños pueden cambiar a medida que los niños crecen y maduran.
Mejor si es un divorcio amistoso
Resolver un divorcio entre los abogados de ambas partes, lo que se denomina "divorcio amistoso", cuesta mucho menos que un litigio. Y puede ser más personalizado. Los jueces no tienen en cuenta las necesidades personales y dividen las cosas teniendo en cuenta lo que dice la Ley únicamente.
Si ambas partes y los abogados tienen problemas para llegar a un acuerdo por su cuenta, existen dos opciones para evitar un litigio: mediación o arbitraje. Ambos implican un tercero neutral. Un mediador, por ejemplo, puede ayudar a ambos cónyuges y sus abogados a tomar una decisión, pero ellos mismos no pueden tomar una decisión. Nadie está realmente contento porque una mediación exitosa significa que todos se comprometen. El arbitraje, por el contrario, es un procedimiento judicial (aunque no en una sala de audiencias), y el árbitro puede tomar decisiones para la pareja que se divorcia.
Resiste la tentación de hablar mal de tu ex delante de tus hijos
Aunque tengas ganas de decir cosas negativas de tu ex, simplemente no lo hagas. Es el padre o la madre de tus hijos y si les trata bien y se comporta como debe ser con ellos, se merece tu respeto solo por eso. Ahora los niños tienen dos hogares, y en ambos hogares se siente como familia, porque es una familia (para tus hijos) en dos hogares diferentes. No puedes insultar esa parte de su vida que también es importante.