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Enseña a tus hijos a ser más optimistas
Enseña a tus hijos a ser más optimistas

POSITIVIDAD

Enseña a tus hijos a ser más optimistas

Los pensamientos pesimistas nos hacen estancarnos y no avanzar, así que debemos enseñar a nuestros hijos a ver el mundo desde una visión positiva.

padre e hijo riendoLos padres queremos que nuestros hijos sean más positivos y sufran menos

¿Se puede conseguir que tu hijo sea más optimista? El optimismo o la convicción de que las cosas saldrán bien al final, es una piedra angular que ayuda en el proceso de recuperación de las personas y es necesario para lograr cualquier tipo de éxito. Existen investigaciones que muestran que los optimistas que logran el éxito, disfrutan más del camino que de la meta gracias al descubrir lo positivo. Ellos, son menos propensos a deprimirse, a frustrarse, a enfermar y además, pueden tener relaciones más largas y a vivir más tiempo. Y por esto, todos los padres del mundo queremos que nuestros hijos sean optimistas.

El optimismo, ¿herencia o aprendido?

Pero lo primero que debes tener presente es que si quieres que en la vida de tu hijo haya bastante optimismo, tú deberás ser su mejor ejemplo a seguir. Los niños necesitan el mejor ejemplo en sus padres. Cuando la vida te hace pasar por momentos difíciles serás tú quien enseñe a tu hijo a creer que las cosas pueden mejorar. De lo contrario, ¿por qué tu hijo debería ser optimista o pensar que puede seguir hacia adelante?

Existen algunas evidencias de que el optimismo es un rasgo heredado, por eso sabemos que hay una base biológica para ser optimista, igual que puede haberla en las personas que sufren depresión. Pero también hay evidencias importantes que las personas, y los niños, aprendemos a una edad temprana a cómo ver el mundo y a descubrir el potencial que tenemos. Si una persona tiene tendencia a ver las cosas en negativo, será más fácil que interprete las cosas de forma negativa.

Las personas pueden cambiar la forma en la que se hablan a ellos mismos, porque la forma en que una persona se habla puede tener un impacto en ellos mismos, en las reacciones emocionales y en las experiencias diarias. Por lo que el optimismo, aunque una persona tenga más o menos tendencia a serlo, siempre podrá aprenderlo para sacar el mayor partido de sí mismo.

niña positivaTodos podemos aprender a ser más positivos

Pero una vez que sabemos todo lo descrito hasta aquí, ¿cómo se puede enseñar a un hijo a que sea más optimista? Y teniendo en cuenta que el primer paso es siendo el mejor ejemplo de optimismo antes las situaciones diarias y adversas, no pierdas detalle de otras técnicas muy eficaces.

Observar el pensamiento de tu hijo

Es necesario que te des cuenta si tu hijo ve el vaso medio lleno o medio vacío. Cuando sucede algo malo tu hijo tenderá a ver las cosas de un modo u otro. Si tu hijo es pesimista no te preocupes porque podrás enseñarle a ser optimista enseñándole algunas técnicas.

Pero si notas que el pensamiento de tu hijo es negativo, lo último que debes hacer es echarte las culpas o pensar que a causa tuya, por cómo eres o por la educación que le has dado tu hijo ha acabado siendo pesimista. Tus pensamientos deben ser positivos desde el principio y eso implica que en lugar de pensar que tu hijo es pesimista, busques formas de aumentar su optimismo y su pensamiento positivo con tu ayuda, tu cariño y todo tu apoyo.

Plantar cara al pesimismo

Los pensamientos pesimistas o negativos tanto en niños como en adultos, pueden definir el cómo se espera que sucedan las cosas o que se espera que sólo sucedan cosas malas. Las personas pesimistas piensan de manera catastrófica y el pensamiento positivo parece todo un reto. Por ejemplo un niño pesimista podría decir cosas como: "Nadie del nuevo cole me va a gustar, así no haré amigos y me quedaré solo". Para poder plantar cara al pesimismo es necesario recordar que las cosas siempre suceden, que no siempre van las cosas por dónde nos gustaría que fuesen y que el victimismo nunca es una buena opción.

Enseñar el optimismo a los niños

El truco está en recordar que tú también percibes las cosas del entorno de un modo u otro y que es necesario que seas optimista para que tu hijo aprenda esa conducta. Además, ayuda a tu hijo a elegir para percibir los contratiempos como algo que es temporal y aislado y no como algo personal, siempre estará en su poder el poder arreglar las cosas para sentirse mejor internamente.

niña haciendo un examenLos exámenes son situaciones donde los niños suelen responder de manera negativa

La realidad es que algunas cosas que suceden y que son malas, podrían haberle sucedido a cualquiera. En muchos casos, es evidente que lo que ocurre no marca el cómo es una persona, no se indica nada acerca de quién espero sí la forma en la que eligió actuar. Por ejemplo, si un niño no aprueba un examen no tiene nada que ver la mala suerte o porque sea un incapaz y sí que no estudió suficiente para ese examen.

Es muy importante ayudar a los hijos a hacerle ver que él no puede hacer nada ante algunas situaciones y en cambio sí puede hacer en otras. Es mejor saber qué se debe hacer cuando una persona se enfrenta a diferentes situaciones. Es muy importante que tu hijo aprenda a responderse a sí mismo la siguiente pregunta: "¿Es posible que haya alguna manera para cambiar el resultado con un poco de esfuerzo?"

Detener el pensamiento negativo

El problema cuando se intenta enfrentar el pensamiento interno es cuando sólo se tienen pensamientos negativos y la persona se piensa que es verdad. Es necesario hacer frente a este tipo de pensamiento en un proceso de tres paso:

1. Identificar el pensamiento negativo

2. Exteriorizar el pensamiento y ponerlo en duda

3. Discutir ese pensamiento negativo como si lo hubiera tenido otra persona, ¿qué le dirías?

Las personas tenemos la habilidad de disputar lo que otras personas hacen y podemos aprender a hacerlo con nosotros mismos para conseguir buenos resultados y así saber qué es lo mejor que podemos hacer.

Esta es una pequeña guía para que enseñes a tu hijo a poder empezar a pensar con pensamientos positivos y que de esta manera pueda vivir su vida con más alegría y más felicidad. Tener un pensamiento negativo sólo hará que el vaso siempre se vea medio vacío cuando en realidad está medio lleno, ¡somos nosotros quienes lo decidimos! Así que no dudes en transmitir a tu hijo todo el poder que tiene para cambiar las cosas en su vida.

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