Cuando vas a comprar al supermercado puede ser toda una Odisea, teniendo en cuenta que en la gran mayoría de ocasiones los niños acaban gritando en el suelo. Mientras que algunos niños están aburridos, otros están abrumados por las luces, el sonido, la actividad. ¡Y muchos de ellos ven muchas golosinas que realmente quieren comer! Son muchos los estímulos y a los niños les cuesta centrarse en su comportamiento.
Muchos padres dejan de llevar a sus hijos a los supermercados solo por el esfuerzo extra que conlleva y evitar el dolor de la cabeza. ¡Y qué hablar de la vergüenza de lidiar con una rabieta mientras todos miran! En cambio, no todos los padres pueden optar por encontrar tiempo de soledad para comprar en el supermercado y deben llevar a sus hijos consigo. Si esto te ocurre, no te preconoces porque hay algunos consejos que puedes tener en tu mente para prevenir las rabietas de tus hijos en el supermercado.
Establece unas reglas claras
Antes de entrar en la tienda o en cualquier lugar público, establece reglas que tus hijos deben entender con claridad. Los niños necesitan aprender qué tipos de comportamientos son aceptables en diversos entornos públicos. Entonces, si en el recreo de la escuela está bien correr y gritar mientras juega, esto no está permitido en el supermercado porque puede molestar a las demás personas.
Habla con tus hijos sobre la importancia de no gritar y de caminar a tu lado para no perderse. Si hacen las cosas bien podrán tener consecuencias positivas como escoger una golosina antes de salir del supermercado. En cambio, si hacen las cosas mal, quizá se queden sin parque esa misma tarde.
Evita que suceda
Si conoces a tus hijos sabrás que probablemente si tienen sueño o hambre se comportarán peor. En este sentido, evita ir a comprar al supermercado en un horario donde tus hijos deberían estar durmiendo o que deberían estar merendado. Los niños deben estar tranquilos para disfrutar del momento, y para estar tranquilos, tendrás que tener sus necesidades básicas bien cubiertas, ¡y también las necesidades emocionales!
Los niños no quieren portarse mal en el supermercado, pero necesitan tu guía para saber cuáles son los comportamientos aceptables de los que no lo son. Además, también necesitarán comprender las cosas desde el respeto y el amor incondicional. Si es necesario que utilices el tiempo de espera hazlo, pero siempre desde el respeto hacia tu hijo y no como castigo, si no para que comprenda qué es lo mejor para él/ella en cada caso.