No hay nada más aterrador para un padre o una madre que pensar que su bebé puede ahogarse o que tenga dificultades para respirar después de haber tomado su biberón o mientras se está alimentando. Es bastante habitual que los bebés se atraganten porque sus vías respiratorias son pequeñas.
También puede ocurrir que los bebés tengan una condición médica subyacente que provoque que puedan atragantarse con mayor facilidad como un trastorno de la deglución o un retraso en el desarrollo. Si tu bebé es propenso a atragantarse o a asfixiarse, será necesario volver a pensar por qué sucede y asegurarte de que le estás alimentando realmente de la forma correcta.
No necesitas tetinas especializadas o biberones caros para evitar que tu bebé se atragante con el biberón, solo deberás tener en cuenta algunos consejos y pasos para que se evite o se diminuya la posibilidad de que ocurra.
Cuál es la edad de tu bebé
Primero deberás buscar la tetina que sea recomendada para la edad de tu bebé. Revisa la etiqueta de la tetina del biberón para que sea la correcta para su rango de edad. La leche de fórmula deben fluir a través del agujero a una velocidad de una gota por segundo. Si fluye más rápido, o si hay una grieta en la tetina cerca de la punta, tendrás que cambiarlo antes de alimentar a tu bebé.
Sostén bien al bebé
Sostén a tu bebé para que la cabeza esté ligeramente elevada y recta. No permitas que la cabeza de tu bebé se incline en ninguna dirección. Antes de ofrecer el biberón deja que la tetina se llene de leche. También es recomendable mantener el biberón en ángulo recto.
La posición y el cómo sostengas al bebé es fundamental porque de esa manera podrás asegurarte de que tenga una buena postura y que la leche no se le desvíe hacia otra parte que no sea dónde debe ser.
Coloca la tetina contra los labios del bebé
Coloca la tetina sobra los labios de tu bebé y permite que sea él quien mueva de forma cómoda la tetina hacia su boca. El reflejo de succión también funciona con los bebés que toman biberón y así podrá tomar bien su leche de fórmula.
Observa a tu bebé mientras bebe la fórmula. Si comienza a tragar con fuerza, esta es una señal de que el flujo es demasiado fuerte, lo que podría provocar que el bebé se ahogue por atragantarse. Si esto ocurre, reemplace la tetina por una que fluya a la velocidad adecuada.
Que su cabeza no se incline
Continúa alimentando a tu bebé, asegurándote de que su cabeza no esté inclinada y ligeramente elevada. Si comienza a ahogarse o vomitar, retira la botella de la boca de inmediato y levántela lentamente. Permite que trague toda la leche de formula cuando acabe una toma antes de continuar la alimentación con las siguientes tomas.
¿Tu bebé está lleno?
Deberás prestar especial atención a las señales de que el bebé está lleno. Si tu bebé deja de chupar la tetina del biberón y escupe la fórmula o la leche, tendrás que retirar la tetina de la boca. Dejar demasiado tiempo la tetina en la boca del bebé, puede hacer que el líquido llene la boca del bebé sin que quiera seguir tragando lo que podría provocar una asfixia y un atragantamiento.
Retira la tetina de la boca de tu bebé
Retira la tetina de la boca de tu bebé, sobre todo si se queda dormido al final de la alimentación. Si aún está chupando es recomendable un cambio para permitir que el bebé respire y coja aire. Recuerda que el bebé se alimenta lo que tiene hambre, debe ser a demanda por lo que si no tiene más hambre, no le obligues a comer más.