Menú
Cómo evitar el síndrome de hombros caídos en los niños
Cómo evitar el síndrome de hombros caídos en los niños

HOMBROS CAÍDOS

Cómo evitar el síndrome de hombros caídos en los niños

Son muchos los niños que tienen el síndrome de hombros caídos... ¿cómo se puede evitar para que no tengan problemas de salud en el futuro?

Mantener una postura correcta es importantísimo para la salud, aún más en los primeros años de edad, por eso es fundamental aprender a mantenernos erguidos. A priori, conseguir una postura correcta al caminar o incluso cuando estamos sentados, parece tarea fácil, pero no es sencillo, ejemplo de ello puede ser el síndrome de hombros caídos, una afección que también se puede dar en los niños y que no sólo conlleva dolores musculares, sino también puede degenerar en otros problemas de la salud.

Prevenir el síndrome de hombros caídos está en nuestra mano, si bien, necesita de constancia y esfuerzo, resulta imprescindible corregirlo en cuanto el pequeño presenta los síntomas que más adelante indicaremos. Para corregir la mala postura y, por ende, prevenir las posibles afecciones que se puedan desarrollar con el tiempo, existen ejercicios específicos bastante eficaces que explicaremos a continuación.

¿Padece tu hijo el síndrome de hombros caídos?

Se denomina síndrome de hombros caídos al problema postural en el que los hombros tienden hacia adelante y la cabeza también inclinada hacia el suelo, encorvando los hombros y la espalda. Un síndrome que afecta a miles de persona, incluidos los niños.

Su origen puede deberse a una mala postura tanto al caminar como en reposo, pero los médicos, también apuntan a que esta afección puede tener origen en un problema psicológico. La postura corporal también es el reflejo de como nosotros nos vemos y de la vida que llevamos, estar encogidos o con la espalda y los hombros caídos o inclinados, puede deberse a la timidez o incluso a un sentimiento de inferioridad.

Su origen puede deberse a una mala postura tanto al caminar como en reposoSu origen puede deberse a una mala postura tanto al caminar como en reposo

El síndrome de los hombros caídos no solo afecta a la espalda, también, debido a la mala postura se pueden presentar molestias en el cuello, originar lumbagia, y acortar la altura. Si persiste en el tiempo el padecimiento de hombros caídos puede dar lugar a una cifosis dorsal, comúnmente conocida como joroba. Por último, estéticamente, el abdomen también se ve más abultado.

Si tu hijo presenta mala postura, se queja de dolores cervicales o de lumbares, seguramente esté padeciendo el síndrome de hombros caídos, lo mejor es acudir cuanto antes a un profesional que os dará un diagnostico firme de la afección del menor, tras una primera revisión el profesional mandará ejercicios para mejorar la postura y prevenir posibles problemas dorsales.

En casa también podéis realizar ciertos ejercicios que ayudarán a conseguir la postura deseada, evitando así arquea de forma excesiva la espalda y los hombros. Hay que recordar que el uso prolongado de dispositivos tecnológicos, tales como móviles y tablets, también pueden afectar seriamente la postura del menor. Es recomendable limitar el uso de estos dispositivos a una o dos horas al día, dependiendo de la edad y el uso que se le dé.

Es importante controlar el peso de la mochila de tu hijo, pues el síndrome de hombros caídos también se puede dar por un peso excesivo en la mochila escolar del menor.

¿Cómo se puede evitar y corregir la postura de hombros caídos?

Corregir y prevenir una mala postura dorsal es posible, siempre y cuando se tenga constancia en los ejercicios y se sigan las pautas recomendadas por los profesionales de la materia. A continuación, os vamos a explicar una serie de ejercicios que pueden ayudar y mitigar el dolor muscular de los niños que padezcan el síndrome.

Para comenzar, es fundamental que estos ejercicios que os vamos a detallar se les presenten como un juego y no como una obligación, los niños van a acceder a realizar de forma constante estas pautas si la toman como algo divertido y no como un ejercicio que hay que hacer porque sí.

Corregir y prevenir una mala postura dorsal es posibleCorregir y prevenir una mala postura dorsal es posible

Para conseguir una buena postura de hombros es fundamental ejercitarlos, para ello hay que incidir en la rotación de los mismos. Durante al menos treinta segundos intenta que mantenga los hombros hacia atrás, podéis repetir este ejercicio cinco veces al día.

También ayudará el estiramiento de todos los músculos dorsales, tumba al pequeño en una esterilla y haz que se lleve la rodilla al pecho con ayuda de las dos manos al menos veinte segundo con cada pierna, repetid este ejercicio cuatro veces al día.

Otro ejercicio bastante eficaz es el de intentar mantener una pelota de tenis entre tu espalda y una pared. Colocad una pelota de tenis entre la zona alta de la espalda y la pared e intenta que aguante durante al menos un minuto sin que se caiga, podéis hacer este ejercicio con toda la zona dorsal todos los días. Podéis hacerlo de pie y sentado con la espalda recta.

Los ejercicios de estiramiento con bandas elásticas también son bastante recomendables y además a los niños les parecerá divertido. Además, también existen otros accesorios que pueden ayudar a mejorar la postura al caminar, pero siempre consulta antes con un médico. Corregir la postura al caminar es lo primero que tendréis que conseguir.

La consulta previa con un profesional es fundamental para corregir de forma definitiva el síndrome, tanto fisioterapeutas como si creemos que, además, se puede tratar de un problema psicológico.

Te puede interesar