Desde que una mujer sabe que está embaraza por primera, una de las cosas que más le van preocupando, y sobre todo cuanto más se acerca la fecha de dar a luz, es cómo será el parto. Cuánto duele, cuánto dura, qué pasa con su cuerpo y con el de su bebé son algunas de las cosas que le pasan por la cabeza cada noche y cada día y no le dejan dormir. Es importante saber a ciencia cierta la respuesta a estas preguntas, ya que cada mujer es un mundo en cada etapa de su vida y a la hora de dar a luz no iba a ser menos. Aún así, todas las mujeres pasan por unas fases del parto iguales, que son tres: dilatación, expulsivo y alumbramiento.
Antes de estas tres fases está el preparto, que es cuando la mujer comienza a notar unas suaves contracciones que se producen sobre cada 10 minutos y se empieza a producir el borrado del cuello del útero. Este borrado consiste en que el canal por el que ha de salir el bebé se comienza a acortar, algo que se había ido alargando hasta 3 centímetros durante todo el embarazo pasa a medir 0.5 centímetros para hacer la zona más fácil para la salida del bebé. Desde este momento, se puede decir que el parto ha comenzado.
Primera fase: dilatación
En esta primera etapa, se produce la dilatación del útero hasta un máximo de unos 10 centímetros, que son los que permitirán al bebé sacar la cabeza y poder salir sin problemas. Esta fase se puede dividir a su vez en dos tipos de dilatación: pasiva y activa.
Durante la dilatación pasiva, el cuello del útero pasa de los 0 a los 3 centímetros de ancho y para ello tienen que pasar unas 8 horas. Las contracciones se van acentuando y el dolor cada vez es más agudo. Esta fase es recomendable que transcurra en casa o en algún lugar tranquilo fuera del hospital, ya que no necesita aún de control y puede durar hasta un día entero.
Sin embargo, en el transcurso de la dilatación activa, esta ya llega a los 10 centímetros necesarios para la salida del bebé. Los dolores son mucho más fuertes y se dilata un centímetro por hora, por lo que ya sí que es más recomendable vivir este momento en el hospital. Además, para aquellas madres que lo desean, es en este momento en que te suministran la anestesia epidural. En cuanto esta fase de dilatación acabe, el bebé está preparado para descender por el canal de parto y llegar al mundo.
Segunda fase: expulsivo
Esta etapa empieza cuando la dilatación se ha conseguido por completo y finaliza cuando el bebé ya ha salido al exterior. Puede durar una o dos horas, dependiendo como siempre de la mujer, pero en aquellos casos en los que se haya elegido la opción de la anestesia epidural, puede alargarse un poco. Las contracciones no son con tanta frecuencia como en la dilatación, aunque siguen sintiéndose incluso más, pero esta vez cada 3 minutos más o menos.
En esta fase, la madre tiene la necesidad y obligación de empujar para ayudar a su bebé a deslizarse hacia la salida del útero. Estos 'pujos' deben ser de forma rítmica y con respiraciones controladas. Si hubiera problemas para que el bebé saliera, se podría realizar una episiotomía, es decir, una incisión en la zona que une los genitales con la zona anal (perineo) para facilitar la salida del bebé.
Tercera fase: alumbramiento
Aunque el conocimiento de la mayoría es que el parto acaba con la salida del bebé, hay una tercera de estas fases después de ese momento que es el alumbramiento. En este momento es en el que se expulsa la placenta, ese lugar en el que el bebé se ha encontrado durante toda la gestación. Durante este tiempo, que puede llegar a tardar una hora, también se siguen teniendo contracciones, aunque después de todo lo paso apenas se notan ni son dolorosas. También se producirá a coger puntos si se ha llevado a cabo la episiotomía o se ha producido algún tipo de desgarro con la salida del bebé. En esta fase ya el útero se habrá vuelto a contraer.
Tras estas tres fases el parto ya habrá acabado y tendremos a nuestro bebé en el mundo, para comenzar una nueva y maravillosa etapa de nuestra vida: ser mamá.