Las emociones es fundamental en la vida de los niños, por eso es tan importante empezar a trabajarlas desde que son pequeños. Las emociones y entenderlas es fundamental para que se formen con una personalidad fuerte y que crezcan en empatía hacia los demás y también para que aprendan a ser asertivos.
Además, los niños que entienden de emociones crecerán con una autoestima mucho más fuerte y equilibrada porque sabrán qué sienten, por qué lo sienten y qué hacer para sentirse mejor en momentos determinados. Si quieres fomentar la autoestima de tus hijos con un trabajo emocional, no te pierdas estos consejos.
Fomentar el juego y sus vocaciones
Es importante inculcar el sentido y el deseo de aprender a los niños puesto que esto genera buenas competencias y confianza en sus habilidades y también, mantienen los pies en el suelo. Por eso es importante que a través del juego se fomente en los niños la búsqueda de lo que les gusta, de sus pasiones. Esto les ayudará a tener un mayor amor por el aprendizaje y también se sentirán libres de explorar libremente.
Muchos descubrimientos de nuestro mundo se hicieron por casualidad, por eso mismo, permite que tu hijo explore sus capacidades para que sepa qué es lo que le gusta, ¡y que se divierta con ello! Descubrirás su talento si le observas y él se sentirá bien haciendo lo que hace.
Anímale a expresarse
Los niños deben aprender a expresarse, a ser abierto y respetuosos en los posibles desacuerdos. La asertividad es importante y tienen que aprender a compartir sus opciones y sus emociones sin que eso suponga hacer daño a otras personas. Compartir y desafiar las opiniones de cada miembro ayuda a nuestros niños a comprender que más de una opinión tiene derecho a existir en nuestro mundo, y que nunca hay una solución clara para la sofisticación de la vida.
Además, es importante mostrar respeto por la opinión de los demás para que ellos aprendan a ser respetuosos con los demás también. Para que tus hijos aprendan a ser asertivos, primero deberás ser asertivo tú primero.
Enséñales a relacionarse con sus emociones
Cuando su hijo trate de decirte algo, detente y escucha lo que tiene que decirte, incluso si no comprendes bien todas sus palabras. Necesitan saber que sus pensamientos y sentimientos importan. Ayúdales a reconocer y sentirse seguros con sus emociones, puedes decirles frases como: 'Parece que estás triste porque tienes que despedirte de tu amigo, pero mañana le verás en la escuela'. Le valoras su emoción y le ayudas a entender que existe una solución para que se sienta mejor.
Hacer esto les ayuda a reconocer emociones como la tristeza, la frustración, la ira y se da cuenta de que estás aceptando sus emociones sin juzgarle. Le demuestras que validas sus emociones y que valoras todo lo que te tiene que decir.
No tengas miedo de expresarles las emociones negativas
De vez en cuando, tu hijo puede sentirse frustrado porque no puede hacer cosas que sus amigos pueden hacer, como pintar o jugar al futbol. Puedes validar sus sentimientos y hacerle entender que sabes cómo se siente y que para conseguir mejorar solo tiene que practicar más. Al mismo tiempo, puedes recordarle que él es bueno en otras cosas como por ejemplo, montar puzzles y quizá otros niños no son tan buenos.
Esto puede ayudar a tu hijo a aprender que todos tenemos fortalezas y limitaciones únicas, que hay otros valores que vale la pena reconocer, y que no tienen que ser perfectos para sentirse bien consigo mismos.
No le compares con otros
Las comparaciones son odiosas y debes evitarlas a toda costa. Las comparaciones solo consiguen que los niños se sientan mal consigo mismos para algunos incluso, les puede hacer sentir gran dolor emocional.
Incluso las comparaciones positivas pueden ser perjudiciales porque le pueden hacer tener una idea distorsionada de la realidad sin tener en cuenta sus defectos y sus virtudes. Hay que apreciar a los hijos como personas únicas.