Cuando tu hija te diga que tiene "malas amigas", ha llegado el momento de hablarle sobre las amistades tóxicas y la importancia de mantener las amistades saludables para una buen salud emocional. Las amistades falsas o la manipulación en las relaciones son solo algunas cosas por las que las chicas deben pasar. Esto hará que una chica adolescente se sienta herida emocionalmente, desconcertadas e incluso, perturbadas.
Un día, una chica puede parecer la mejora miga de tu hija y al día siguiente tener un comportamiento tóxico como ignorarle. Tu trabajo como padre o madre es ayudarle a ver que esa "amiga" no lo es realmente, si no que lo que quiere es controlarle.
Por qué existen las malas amigas
Hay razones por las que algunas chicas se convierten en malas amigas, por ejemplo quizá quieran escalar socialmente o están sometida a la presión de los compañeros. Este tipo de "amigas" insultan, propagan rumores, hacen daño psicológico, crean ciberbulliyng, acosan, utilizan tácticas hirientes, etc.
Si tu hija tiene un grupo de amigas malas, o si está siendo el blanco de acoso por culpa de un grupo de chicas, será doloroso para ella, pero podrá superarlo... Aunque ahora mismo pueda ser un gran problema. En caso de que tu hija se encuentre en una situación donde hay chicas malas a su alrededor, entonces deberéis tener lo siguiente en cuenta.
Entiende lo que le ocurre
Probablemente, la manera más importante en que puedes ayudar a tu hija es empatizar con su situación. Recuérdale que nadie merece ser tratado de la misma forma en que la están tratando. Las malas amigas a menudo hacen que los demás se sientan inferiores...
Reforzar todas las cosas positivas que tiene para ofrecer al mundo puede ayudarle a sentirse mejor, ¡porque es la realidad! Asegúrate de que tu hija sepa que ella no es el problema, que las malas amigas son las causantes de lo que está ocurriendo. Ella debe centrarse en sus fortalezas y tú puedes ayudarle a conseguirlo.
Sonríe y mantente fuerte
Las malas amigas a menudo tienen una habilidad natural para discernir a quién pueden controlar y manipular. Por lo tanto, anima a tu hija a sonreír y a permanecer confiada. Ella debe evitar parecer nerviosa, insegura o derrotada. Trabaja con tu hija para ser resistente y desarrollar luna buena autoestima.
Las chicas malas tienen menos probabilidades de repetir sus tácticas si tu hija puede mantener la confianza y el control sobre lo que le ocurre. Enséñale a tener una buena postura, una voz fuerte para hablar y mantener contacto visual. Estas características a menudo disuaden a las chicas malas. Muchas veces, simplemente quieren un blanco fácil.
Seguridad y asertividad
Las niñas necesitan aprender a defenderse, especialmente contra las chicas que no se comportan bien con ellas. La mejor forma de hacerlo es aprender a ser asertivo. El objetivo es que tu hija aprenda a defenderse de forma respetuosa sin ser agresiva o malintencionada, es decir, sin rebajarse al nivel de las malas amigas.
Ella debe encontrar una manera de comunicar que el acoso y las tácticas malintencionadas de esta chica son incorrectas y no serán toleradas. Recuérdale a tu hija que esas chicas malas cuentan con que ella sea pasiva acerca de su comportamiento. Debería mostrarles que calcularon mal cuando la atacaron... Porque se sabe defender y no sus técnicas maliciosas no le hacen daño.
Control en la respuesta
Recuerda a tu hija que aunque no tiene control sobre lo que otras personas dicen o hacen, sí tiene control sobre su respuesta. Enfatiza que no importa lo que diga o haga una mala amiga, debe tratar de mantener las respuestas libres de emociones.
Dile a tu hija: "Si no puedes responder con calma cuando hablas con otra persona, deberías ignorar los comentarios y alejarte". Luego, anima a tu hija a que hable contigo o con otro adulto de confunda a para saber cómo lidiar con futuros ataques. El objetivo es prepararle para futuros ataques por parte de malas amigas... ¡y sacarlas de su vida con éxito!