Aunque la edad legal para casarse en España son los 18 años, quizá tu hijo/a adolescente con 16 ya está planeando casarse cuando cumpla la mayoría de edad. Esto puede ser una preocupación bastante importante para unos padres, que saben qué significa el matrimonio, la lucha que eso supone y que además, su hijo/a es demasiado inmaduro/a como para tomar esta decisión de forma responsable y no tan impulsiva.
Un poco de historia
En la Antigua Roma las personas no se casaban porque estuvieran enamorados, sino que lo hacían para poder continuar con el linaje familiar, por razones económicas o también políticas. Las chicas que estaban bajo la jurisdicción de sus padres, solían casarse entre los 12 y 14 años por acuerdos entre los progenitores. Los chicos solían casarse a los 14 años también.
Durante la Edad Media, la práctica de matrimonios entre edades adolescentes se seguía haciendo y se casaban a los 14 años aproximadamente. Aunque claro, en estas épocas la esperanza de vida era bastante inferior a la esperanza de vida actual.
En general, los hombres solían esperar hasta los 20 o 30 años, pero ellas, sí se casaban siendo adolescente. Lo normal era que un hombre se casase con unos 24 años y las mujeres, con 16. A partir de 1400, los hombres solían casarse a los 30 con chicas de 15 años. Las chicas que tenían más dinero se casaban antes que las chicas que eran pobres.
Esta tendencia, ha ido cambiando con los siglos y con la evolución de la sociedad. Hoy en día, la sociedad no acepta ni ve normal que un adolescente se case. Sobre todo, porque se sabe a ciencia cierta su capacidad cognitiva y emocional, ahora se sabe mucho más sobre la mente y evolución humana que hace siglos y se pueden tomar decisiones a conciencia.
Estadísticas sobre el matrimonio adolescente
¿Por qué hay tantas personas que están en contra del matrimonio adolescente? Se cree que más de la mitad de las personas que se casan en la adolescencia se divorciarán antes de que pasen 20 años. De hecho, las estadísticas así lo demuestran. Por si fuese poco, las chicas que se casan siendo adolescentes tienen más riesgo de analfabetismo, de dependencia económica, menos experiencia en la vida y en el trabajo y de vivir en niveles de pobreza por no poder labrarse un futuro profesional.
Aunque es cierto que no todas las estadísticas de matrimonios entre adolescentes es tan desalentadora. También hay adolescentes que se casan estando enamorados y que no terminan en divorcio, sino que tienen una vida plena en conjunto y para toda la vida.
Qué debe saber tu hijo/a adolescente antes de decir 'sí quiero'
Tendrás que hablar con tu hijo/a adolescente y preguntarle por qué quiere casarse. Si sus razones incluyen que quiere irse de casa, porque se ha quedado embarazada o porque quiere 'atar' a su pareja a su lado para siempre... entonces no debe casarse bajo ninguna circunstancia. Estas razones son banderas rojas y no son válidas para contraer matrimonio. El matrimonio es querer hacerlo y no 'tengo que hacerlo'.
Casarse aleja de los padres sí, pero también trae muchas responsabilidades en la vida. Los adolescentes tendrán que saber sobre economía familiar, tener un hogar estable, tener un trabajo que les proporcione dinero y poder vivir, saber hacer la compra, cocinar, limpiar, tomar decisiones importantes, tener buena relación con la familia política, continua la educación y si se tienen hijos, además de todo lo anterior, ser capaz de cuidar a los hijos y tener una buena comunicación con la pareja en todo momento. Un adolescente que quiera casarse, deberá ser capaz de hacer de forma responsable todo lo comentado en este párrafo.
Habla con tu hijo/a adolescente para saber qué hacer a continuación.