Los padres solo quieren que sus hijos crezcan bien y se desarrollen de forma correcta para que crezcan y se conviertan en personas adultas de éxito. Los hitos del desarrollo de las habilidades sociales y emocionales pueden ayudarte a saber si a tu hijo le falta madurez. Ten en cuenta que los niños se desarrollan a diferentes ritmos, por lo que la inmadurez no siempre es motivo de preocupación... Quizá simplemente tienes que esperar un poco más para que de forma natural tu hijo avance. Pero si interfiere con la vida diaria u otras habilidades de desarrollo se retrasan demasiado, puede ser el momento de buscar ayuda profesional.
A continuación vamos a comentarte las circunstancias en las que un niño puede ser demasiado inmaduro y qué deberías hacer al respecto. Aunque no olvides que no debes forzar a tu hijo a avanzar en ámbitos en los que no se siente preparado, respetar su propio ritmo de desarrollo es esencial para que avance por sí mismo.
Etapas del desarrollo
Las etapas de desarrollo definen las habilidades que deben lograrse para cada grupo de edad, pero los hitos son pautas generales, no plazos definitivos. Cada niño sigue su propia línea de tiempo, pero todos los niños deben dominar las habilidades paso a paso. Este concepto es importante porque ayudar a tu hijo inmaduro puede significar volver a aprender habilidades de una etapa anterior. Pero no creas que esto es retroceder ni mucho menos, solo es reforzar habilidades para que se interioricen mucho mejor.
Desarrollo social
El primer paso para ayudar a la inmadurez social es simplemente pasar tiempo juntos. Interactúa con tu hijo, juega o participa en otras actividades apropiadas para su edad que le permitan modelar y enseñar las habilidades sociales de las que carece tu hijo bajo la apariencia de un juego.
Si tu hijo tiene problemas para jugar con sus compañeros, crea juegos que tengan actividades estructuradas para guiar la interacción social. Permanece cerca de los niños para intervenir y ofrecer sugerencias si es necesario, pero mantente lo suficientemente lejos como para dar la sensación de independencia. El objetivo es desarrollar habilidades y confianza dando el apoyo necesario para garantizar encuentros sociales exitosos. A medida que tu hijo crezca, muestra interés en sus actividades preferidas y mantén la puerta abierta de casa para sus amigos.
Desarrollo emocional
El desarrollo emocional incluye la capacidad de tener amigos cercanos, una buena autoestima, la capacidad de expresar sentimientos, el autocontrol y la responsabilidad por sus propias acciones. Puedes comenzar a fomentar la madurez social si nunca rechazas lo que siente tu hijo. Cuando sus emociones son extremas o inapropiadas para la circunstancia, ayúdale a calmarse y hablar sobre por qué estaba tan enfadado o molesto.
Si no puede explicar cómo se siente, enséñale palabras para definir los sentimientos y ofrece ideas sobre las formas apropiadas de responder. Habla sobre lo que se podría haber hecho para evitar el problema y anímale a pensar en opciones. A medida que tu hijo crece, enséñale cómo comprometerse y retrasar la obtención de las cosas que quiere. No olvides que un horario diario regular y las responsabilidades, como las tareas, contribuyen al desarrollo emocional.
Busca ayuda siempre que sea necesario
Mantén un registro escrito de los comportamientos o interacciones que te preocupan. Presta atención a los hitos del desarrollo y apunta todo para tener un progreso de la evolución de tu hijo. Si es emocional o socialmente inmaduro o si se retrasa en alguna habilidad de desarrollo, habla con tu pediatra lo antes posible. Cuanto antes identifique posibles retrasos en el desarrollo, mayores serán las posibilidades de remediar problemas y más éxito tendrá tu hijo en el hogar, en la escuela y en la comunidad. Nunca dejes de lado alguna preocupación que puedas tener respecto al desarrollo de tu hijo/a y acude al médico para que te oriente en qué puedes hacer para ayudarle.