Los maestros son los guías de los niños, son quienes, además de los padres, motivarán a los niños en su aprendizaje y crecimiento personal. Las acciones de los maestros deben ser profesionales en todo momento, tienen una responsabilidad increíble que nunca debe tomarse a la ligera. Si eres maestro y haces una de estas cosas, tendrá un impacto negativo en tu capacidad de enseñar.
A continuación, vamos a hablarte sobre algunas cosas que los maestros nunca deben hacer hacia sus alumnos, porque podría afectarles durante mucho tiempo.
1. Los maestros nunca deben ponerse en una situación comprometedora con un estudiante
Parece que vemos más en las noticias sobre las relaciones inapropiadas entre maestros y estudiantes que sobre todas las demás noticias relacionadas con la educación. Es frustrante, sorprendente y triste. La mayoría de los maestros nunca piensan que esto les puede pasar, pero las oportunidades se presentan más de lo que la mayoría de la gente piensa.
Siempre hay un punto de partida que podría haberse detenido inmediatamente o prevenido por completo. A menudo comienza con un comentario o mensaje de texto inapropiado. Los maestros deben asegurarse proactivamente de que nunca permitan que ocurra ese punto de partida porque es difícil detenerse una vez que se cruza una línea determinada.
2. Los maestros nunca deben tener una discusión sobre otro maestro con un padre, estudiante u otro maestro
Todos los profesores llevan sus aulas de manera diferente a los otros maestros. Enseñar de manera diferente no necesariamente se traduce en hacerlo mejor o peor. Los maestros no siempre están de acuerdo unos con otros, pero el respeto no se debe olvidar nunca. No se debe analizar cómo otros trabajan en sus aulas con otro maestro o padre.
Si algún padre tiene una inquietud con un profesional educativo, lo que hay que hacer es motivarle para que hable con ese profesional o con el director de la escuela. Si se habla a espaldas de otra persona esto genera división y discordia, algo que hará que sea más difícil trabajar, enseñar y aprender en un lugar armonioso.
3. Los maestros nunca deben humillar a un estudiante, gritarles o insultarles
Los maestros esperan que sus estudiantes les respeten, pero el respeto es un camino de doble sentido. Por este motivo, los maestros también deben respetar a sus estudiantes en cada momento. Incluso cuando están probando tu paciencia, se debe mantener la calma.
Cuando un maestro desanima a un estudiante, le grita o le insulta delante de otras personas, estará socavando su propia autoridad con todos los demás estudiantes de la clase. Este tipo de acciones ocurren cuando un maestro pierde el control y los maestros siempre deben mantener el control de su clase y de ellos mismos.
4. Los maestros nunca deben ignorar la oportunidad de escuchar las preocupaciones de los padres
Los maestros siempre deben dar la bienvenida a cualquier padre que quiera tener una conversación con ellos siempre y cuando el padre no esté enfadado. Los padres tienen derecho a hablar las inquietudes con los maestros de sus hijos. Algunos maestros malinterpretan las preocupaciones de los padres como un ataque personal contra ellos mismos.
A decir verdad, la mayoría de los padres simplemente buscan información para poder escuchar ambos lados de la historia y rectificar la situación. Sería mejor que los maestros se comuniquen proactivamente con los padres tan pronto como el problema comience a desarrollarse.
5. Los maestros nunca deben volverse complacientes
La complacencia arruinará la carrera de un maestro. Siempre se deben esforzarn por mejorar y convertirse en mejores maestros de lo que ya son. Deben experimentar con sus estrategias de enseñanza y cambiarlas un poco cada año. Hay múltiples factores que justifican algunos cambios cada año, incluidas las nuevas tendencias, el crecimiento personal y los propios estudiantes. Los maestros deben desafiarse a sí mismos con la investigación continua, el desarrollo profesional y manteniendo conversaciones regulares con otros educadores.