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La necesidad de hacer un regalo el Día del Padre
La necesidad de hacer un regalo el Día del Padre

REGALOS PARA PAPÁ

La necesidad de hacer un regalo el Día del Padre

Es habitual hace regalos material a los padres en su día, pero existen alternativas mejores para hacer felices a nuestros progenitores.

Niña dando un regalo a su padreEs habitual hacer un regalo en el Día del Padre

El día del padre es una celebración que tuvo su origen, al igual que el día de la madre, en tener una jornada especial en la que disfrutar en familia y también agradecer al progenitor los cuidados y apoyos prestados, ya fuera en la niñez como también en la edad adulta.

Sin embargo cada vez ha adquirido un tinte más comercial en el que se ha venido imponiendo la necesidad de hacer un regalo y parece que se crea cierta competición por ver quien es la persona que da un presente más caro o la que se esfuerza más en ser original a la hora de regalar. Esto puede derivar en conflictos innecesarios y que no tienen nada que ver con el motivo de celebración.

Historia del día del padre

El día del padre se celebra en diversos países de todo el mundo y en días diferentes, pero el origen de esta fiesta se encuentra en Estados Unidos, a principios del siglo XX. En 1909 a Sonora Smart Dodd se le ocurrió instaurar un día en que agradecer a su padre, Henry Jackson Smart, los cuidados prestados a la familia a pesar de no tener ayuda después de que su esposa falleciera en el parto del sexto hijo. Apenas 15 años después de que a Smart Dodd se le ocurriera este homenaje a todos los padres el Gobierno estadounidense acordó instituir el día del padre. Años más tarde se proclamaría que su celebración sería el tercer domingo de junio, tal y como se mantiene hoy en día.

El origen de la celebración del Día del Padre está en Estados Unidos

Espíritu comercial

Las celebraciones en un principio mantuvieron la idea de agradecimiento con la que la inició Smart Dodd, sin embargo en los últimos años nos hemos visto invadidos por un espíritu comercial, al igual que ocurre en otros momentos del año, que ha llevado a olvidar cual es el verdadero espíritu de esta festividad. En las familias parecen instaurarse competiciones por ver quien hace el mejor regalo, algo que se parece fomentar incluso entre los más pequeños, al comparar entre los amigos lo que cada uno de ellos va a regalar a su padre.

Ocasiones como la actual, con una acuciante crisis económica, parecen el momento adecuado, o al menos más práctico, para reflexionar un poco sobre esta celebración. ¿Es necesario invertir una gran cantidad de dinero en el regalo? No, sobre todo si no abunda y simplemente se regala por el hecho de cumplir con algo parecido a un trámite. Además, hay otras cosas que regalar al margen de lo material. Una fiesta, que no hace falta sea excesiva, o una íntima reunión familiar puede ser el mejor regalo que se le puede dar a un padre en un día de celebración como este en el que se quiere agradecerle la dedicación y el cariño prestado a sus hijos.

No solo los regalos materiales hacen ilusión a los padresNo solo los regalos materiales hacen ilusión a los padres

Cierto que un regalo puede ser un recuerdo, pero no hace falta tampoco tirar la casa por la ventana, pero tampoco es necesario regalar objetos que van a acabar por no ser usados. Si son varios los hijos pueden unir presupuestos y hacerle un presente de mayor valor.

Manualidades para los más pequeños

En el caso niños pequeños las manualidades siguen siendo un buen regalo. Habitualmente en clase en los días previos al día del padre preparan algún tipo de regalo hecho por ellos mismos y para regalar a sus padres. Sin embargo se puede ser más original y buscar un regalo propio. Consultando en internet existen cantidad de tutoriales en los que guían paso a paso para elaborar con sus propias manos lo que van a regalar. Además de materiales lo único que necesitarán es la ayuda de un adulto que les ayude.

Mejor regalo que algo hecho por ellos mismos es compartir un momento juntos. Preparar una comida juntos, ir a buscarle al trabajo y volver caminando a casa mientras hablan o simplemente una tarde de juegos pueden ser lo mejor que se puede regalar a un padre, especialmente aquellos que por unas u otras razones no pueden pasar demasiado tiempo con sus hijos.

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