Los niños dicen las cosas más tontas. Es muy difícil escuchar a un niño decir "Me odio a mí mismo" o "Odio mi cuerpo". Los padres u otros cuidadores pueden preguntarse cuál es la raíz de tales declaraciones, así como cómo ayudar y qué decir para que los niños cambien esos pensamientos autodestructivos por otros más reales y beneficiosos para ellos. Afortunadamente, con un poco de escucha, trabajo de detective y determinación, la mayoría de los padres descubrirán que estas palabras simplemente están hablando de grandes sentimientos que necesitan expresión.
Para poder ayudar a un niño que tiene palabras de odio a sí mismo e incluso actitudes negativas hacia su propia persona, primero hay que descubrir de dónde vienen esos sentimientos. Es posible que las emociones que siente no sepa manejarlas por lo que será necesario saber cómo actuar para que la situación no se agrave.
Falta de autocontrol
Los niños actúan por impulso y a menudo dicen cosas cuando se sienten mal que los padres no pueden soportar. Es necesario mirar hacia nuestros propios patrones de impulsividad para que podamos aprender a modelar y enseñar el autocontrol real. Comparte prácticas breves como la meditación, la relajación consciente, la respiración profunda y la escucha de todo el cuerpo para ayudar a los niños a tener un espacio entre el impulso y la acción.
Ejemplo de otros
Los niños siempre están mirando a los demás. Si alguien en el entorno de un niño usa frases como "Me odio a mí mismo" cuando se siente molesto, es probable que el niño recurra a lo mismo cuando las emociones fuertes golpeen su corazón. Es necesario cambiar el diálogo interno negativo y di cosas buenas de ti cuando tus hijos te escuchen, pero además deben ser cosas reales. Puedes decir cosas agradables de ti y tu cuerpo, como por ejemplo:"Me gusta mi cuerpo, mi nariz y mi voz".
Culpa
Un niño que siente que no puede hacer nada bien puede deducir que no es valioso. Los niños que se sienten culpables pueden decir que se odian a sí mismos. Si siente que hizo algo mal y que a sus padres u otras personas no les gusta, puede sentir desdén por sí mismo. En estos momentos, y en general en la crianza de los hijos, puede ayudar a que los niños sepan que está bien cometer errores y aprender de las lecciones.
Temor
Castigar y avergonzar a los niños por sus acciones puede provocar miedo cuando hacen algo mal. Esto puede conducir a declaraciones de odio a sí mismo y a mentiras. En lugar de recurrir al castigo, es necesario saber qué es lo que le preocupa a tu hijo. A medida que te calmes, alivias el miedo del niño y le haces saber que está bien sentir lo que siente mientras aumenta su confianza. Por ejemplo, un padre podría decir algo como: "Te sientes bastante mal en este momento. Parece que estás frustrado porque te has caído, te entiendo, yo también me he caído. Todos lo hacemos... pero mira, te levantaste de nuevo."
Abuso
Los niños abusados emocional o físicamente pueden decir que se odian a sí mismos debido al dolor causado por el abuso. Si un padre o cuidador sospecha abuso, hay que buscar ayuda profesional lo antes posible y hablar con el niño para saber qué está ocurriendo exactamente. Por ejemplo, si sospechas de abuso, podrías decirle al niño: "Estoy aquí para escuchar. Puedes decirme cualquier cosa que necesite decirme". El odio autodirigido es como un grito de ayuda que podemos responder escuchando, dejando que los niños sepan que los amamos y que queremos ayudarlos a sentirse mejor consigo mismos.