A día de hoy existe cierta controversia acerca de si es necesario llevar a los hijos a la guardería, para que puedan socializar con otros pequeños de la misma edad. Hay padres que piensan que es algo que debe hacerse de manera obligatoria y otros padres que no están de acuerdo con dichas ideas. La guardería es un espacio importante para poder interactuar pero no por ello resulta obligatorio para el niño. En el siguiente artículo te hablamos del desarrollo social de los pequeños y qué papel tienen los padres en este asunto.
El desarrollo social de los niños pequeños
A la hora de hablar del desarrollo social de los pequeños hay que hacerlo teniendo en cuenta las diferentes franjas de edad que comprenden la infancia :
- La primera franja de edad comprende desde el nacimiento del bebé a los 3 meses. En ella el pequeño va a interactuar con los padres mediante el llanto y los movimientos. El apego se empieza a formar y el bebé se tranquiliza y se relaja al estar con los progenitores.
- Desde los 4 a los 7 meses de edad el bebé comienza a demandar la atención de los padres de una manera intencionada y voluntaria. Comienzan a prestar atención al entorno y ya son capaces de mantenerse sentado sin la ayuda de los padres.
- Desde los 8 a los 12 meses el pequeño interactúa mucho más con los padres y requieren constantemente su atención. Por otra parte, el bebé ya es capaz de reconocerse cuando se mira en un espejo.
- En la franja de edad que comprende desde un año a los dos años, el bebé piensa que todo gira alrededor de su persona. Tienen un gran interés por jugar a todas horas con los padres. En esta edad los bebés se niegan a compartir sus juguetes con otros pequeños.
- La última franja de edad es aquella que va desde los 3 años a los 4 años. En esta edad los pequeños comienzan a jugar y a interactuar con otros niños de su misma edad. La figura del amigo comienza a estar presente en el día a día del pequeño.
¿Es necesario acudir a la guardería para que los niños sepan socializar?
En principio el entorno familiar es más que suficiente para que un niño sea capaz de irse desarrollando a nivel social. De todas maneras hay que tener en cuenta en todo momento las necesidades que tiene el pequeño y adaptarse a las mismas para que su desarrollo social sea el más óptimo posible. Ir a la guardería no es sinónimo de que el pequeño vaya a socializar mucho más que otros niños que no acuden a la misma.
Los expertos en el tema aconsejan llevar a los hijos a la guardería a partir de los tres años de edad. Se trata de una edad en la que los pequeños comienzan a interactuar con los demás niños y muestran un buen desarrollo social.
En definitiva, los pequeños necesita socializar con otros niños pero siempre a la edad adecuada. A partir de los 3 años de edad los niños comienzan a interactuar con otros niños y a considerarlos como amigos con los que jugar. Interactuar va a reportar una serie de beneficios a los niños, les permite resolver diversos conflictos y compartir ciertas ideas que no pueden realizar con los adultos.
Antes de los 3 años de edad los padres son los encargados de que el pequeño empiece a desarrollarse a nivel social. La guardería por lo tanto no es algo obligado durante los primeros años de vida del pequeño. Aparte de la familia más cercana, el niño puede interactuar sin problema alguno con otros pequeños en diversos lugares como los parques infantiles o en espacios lúdicos.