A los niños les encanta ir descalzos en casa pero los padres se preocupan por si eso puede ser malo para su salud o si por culpa de ir descalzos se clavan algo como una piedra o un trozo de vidrio. La preocupación es normal pero... ¿es necesario preocuparse tanto?
Hay mucha controversia en cuanto a los pensamientos de los padres y de si los padres deben o no dejar a sus pequeños andar descalzos por casa. Los zapatos ayudan a que los niños tengan los pies y las piernas más fuertes y mejoran la postura... Aunque esto también puede desarrollarse con los pies descalzos.
La Asociación Médica Americana Podriátrica (American Podiatric Medical Association) no niega por completo los beneficios de que los niños vayan descalzos. Ellos afirman que correr descalzo ha sido valorado para mejorar la fuerza y el equilibrio, mientras promueve un estilo para caminar más natural. Sin embargo, los riesgos de correr descalzo incluyen una falta de protección, que puede provocar lesiones como heridas y un mayor estrés en las extremidades inferiores.
El uso de los zapatos aumenta la fuerza de reacción del suelo a su impacto, lo que reduce el riesgo de lesiones ante la protección que facilita el calzado. Sin embargo, caminar deslazo aumenta la rotación interna de la tibia y se puede asociar a tipos específicos de lesiones. Teniendo esto en cuenta, le corresponde a los padres (y, si se les consulta, al pediatra del niño) sopesar los riesgos y beneficios para determinar si desean alentar a sus hijos a que no usen calzado.
Los primeros zapatos del bebé
A pesar de lo que les suele gustar a los padres ponerle a los niños zapatillas pequeñas, no hay evidencia científica que concluya que los bebés necesiten usar zapatos una vez que hayan aprendido a caminar. De hecho, lo opuesto puede ser cierto: ir descalzo ayuda a un niño pequeño mejore el equilibrio, la fuerza y la coordinación.
Lo único que se debe tener en cuenta es la temperatura de la superficie sobre la que camina el niño. Si hace frío, algo con una suela delgada, como botines o calcetines, protegerá sus pies de las superficies frías. De lo contrario, permite que el niño andador explore la textura y la sensación de varias superficies, ya sea de hierba, baldosas, arena o alfombras ... tu hijo te informará de las texturas que le gusta más.
Los primeros años del niño
Hay estudios que llegan a la conclusión de que las personas tienen los pies más sanos antes de comenzar a usar zapatos con regularidad. El calzado comercial común no es saludable para los pues de las personas (adultos). Los zapatos de los niños deben ir cambiando a medida que el pie del niño crece, por lo que se debe ajustar a la forma del zapato. Permitir que los pies se desarrollen naturalmente significa que deberá ir descalzo en algunos momentos del día.
Posibles problemas con los zapatos
El mayor problema con los zapatos para niños es su rigidez. A un niño le gusta correr libremente, trepar árboles y no parar de moverse. Hay muy poca inclinación o elasticidad en la suela del zapato de un niño. La falta de contacto directo con la superficie sobre la que corre o trepa también puede ocasionar problemas, por ejemplo, no poder conectarse con la tracción de una rama de árbol, lo que puede hacer que el niño resbale y se caiga.
Los zapatos mal ajustados y el uso inadecuado también pueden causar uñas encarnadas y problemas estructurales en el pie de un niño. Y el uso inapropiado de zapatos que no permiten el secado podría llevar a padecer hongos en los pies.
Equilibrar el tiempo descalzo con tiempo en zapatos
Incluso los mayores defensores de ir descalzos entienden que hay algunos lugares donde los niños probablemente deberían usar zapatos, aunque vale la pena señalar que cuanto más descalzo va un niño, mayor será la protección natural que sus pies tendrán de los peligros, aunque probablemente no sean clavos o tornillos.
Si quieres dejar descalzo a tus hijos tendrás que encontrar el equilibrio de esta manera:
-Insiste a tu hijo de usar zapatos cuando camine alrededor de lugares peligrosos como alrededor de piscinas, vestuarios o cualquier lugar donde pueda hacerse daño.
-Deberá tener la vacuna del tétanos puesta
-Insiste que tu hijo se ponga protección solar en los pies.