Se puede pensar que tener un parto en casa es algo natural y más tranquilo que estar en el hospital rodeada de médicos y enfermeros, pero no es una decisión que deba tomarse tan a la ligera. Si durante el parto aparecen complicaciones las consecuencias pueden ser devastadoras, por ello, es fundamental informarse bien antes de tomar la decisión porque es posible que no sea la mejor opción para ti.
¿El parto en casa es adecuado para ti?
Es cierto que tener un parto en casa es una tendencia en auge, pero existen riesgos importantes para muchas mujeres, por lo que el asesoramiento médico y la información son fundamentales. Existen tres factores básicos a la hora de tener un parto en casa:
- Tu estado de salud es excelente
- Tu embarazo se ha desarrollado sin complicaciones
- Vives cerca de un hospital en el caso de que surjan problemas inesperados
Antes de decidirte a tener un parto en casa, asegúrate de cumplir con los siguientes criterios:
- Tu embarazo ha sido saludable y no tienes ninguna afección como la presión arterial alta, diabetes, VIH, hepatitis o lupus
- En anteriores embarazos no has tenido una cesárea o un parto prematuro
- No tienes un embarazo múltiple, es decir, no esperas gemelos, trillizos, etc.
- No esperas que tu bebé pese más de 3'5 kilos
- Puedes llegar a un hospital en 15 minutos o menos
Cuando la fecha de parto prevista esté cerca, hay un par de condiciones importantes más que debes considerar antes de dar a luz a tu bebé en casa:
- Tu bebé debe estar en la posición correcta para salir, es decir, con la cabeza ya posicionada abajo. Los bebés generalmente giran a esa posición entre la semana 32 y la 36.
- Debes estar entre la semana 36 y 41 de tu embarazo. Si tu parto comienza antes o después de estas semanas es mejor que tengas a tu bebé en el hospital.
Conoce los riesgos de tener un parto en casa
Si cumples los requisitos que hemos mencionado antes y estás considerando seriamente que tu bebé nazca en casa, asegúrate de entender todos los riesgos que ello implica y discútelo con tu pareja y tu entorno más allegado. Consecuencias a tener en cuenta para tu bebé:
Los bebés que nacen en casa es más frecuente que tengan un mal color de piel, mal pulso y menos vigor justo después del nacimiento. Estas señales podrían indicar una posible complicación.
Los bebés nacidos en casa tienen más posibilidades de morir poco después del nacimiento. Si tú o tu bebé necesitáis atención médica urgente, tendrás que desplazarte a un hospital, lo que retrasará que recibáis atención cuando la necesitéis.
Tener a tu bebé en casa también exige un trabajo extra por tu parte, ya que tendrás que buscar una matrona cualificada que tenga experiencia en partos en hogares. También tendrás que preparar tu hogar para el esperado momento.
La importancia de la matrona
Tener una matrona experimentada que te asista mientras das a luz en tu hogar te ayudará a minimizar riesgos, de hecho, marcará la diferencia haciendo que un parto que pudiera ser arriesgado esté más controlado.
Cosas que debes saber antes de que una matrona te asista en casa:
- ¿Cuánta experiencia tiene?
- ¿Cuántos partos a domicilio ha asistido?
- ¿Qué complicaciones ha encontrado durante un parto en casa?
- ¿Qué protocolo sigue en caso de que se necesite atención de emergencia?
- ¿Qué métodos utiliza para controlar el dolor?
- ¿Tiene experiencia en la reanimación neonatal?
- ¿Tiene relación con el hospital y su personal médico?
- ¿De qué equipo dispone para asistir un parto en casa?
- ¿Algún médico le respalda en caso de emergencia?
- ¿Tiene referencias?
¿Por qué muchas mujeres prefieren el parto en casa?
A pesar de los riesgos, la idea de dar a luz en un lugar tan familiar como el propio hogar resulta atractiva para muchas mujeres. El parto en casa da mucha más libertad ya que, por ejemplo, pueden asistir al alumbramiento más personas, familiares y amigos, si la futura madre así lo desea.
También se puede ver como una experiencia el mantener al margen los avances tecnológicos teniendo un parto tradicional, tal y como se hacía antiguamente. Las mujeres que dan a luz en casa suelen tomar menos analgésicos. También se suelen someten a menos episiotomías o a cesáreas que las mujeres que acuden a un hospital. Los partos en el hogar también causan menos complicaciones para la madre, como los desgarros, las infecciones o las hemorragias.
Hay personas que ven en la idea de dar a luz en casa es un auténtico lío o trastorno, que se llenará todo de sangre y que puede ser un desastre en muchos aspectos. Pero en realidad no es para tanto. La matrona y el personal que asista al alumbramiento cubrirán la cama y las zonas implicadas en plástico, que después se desecha quitando muchas horas de limpieza. Todo el material necesario lo llevará la matrona, y cuando todo haya pasado dejarán tu hogar lo más aseando posible, lo que no implica que haya que hacer algo de limpieza extra después del parto, cuando la matrona ya se haya marchado.
Conclusión
El parto en casa no es adecuado para todas las mujeres puesto que no está exento de riesgos. Pero si tienes pensado que tu próximo parto sea así, asegúrate de investigar. Pídele al médico que lleva el seguimiento de tu embarazo que te informe de si podría ser peligroso para ti y para tu bebé tener el parto en casa. Por último, encuentra una matrona cualificada y con experiencia para que te asista.
Dar a luz a tu bebé en tu hogar será una experiencia inolvidable, pero no olvides que ante todo está la seguridad y, por tanto, debes tenerlo todo controlado para que un imprevisto no convierta una bonita experiencia en algo negativo.