La osteopatía es una técnica que consiste en masajear zonas claves del organismo humano cuando se sufre de alguna dolencia o se quiere tratar contra aluna enfermedad pero sin recurrir a la medicina como tal. La osteopatía se ha puesto muy de moda en los últimos años ya que se trata de una técnica que realiza un osteópata y que respeta mucho la fisionomía humana.
La osteopatía recurre siempre a los bienes naturales y nunca consiente el tratamiento de algún paciente con elementos químicos. Desde hace un tiempo surgió la unión entre osteopatía y embarazo, lo cual ayuda a las mujeres que están esperando para ser madres a tener un periodo de gestación mucho más relajado, con menos molestias, y por lo tanto, mucho más felices.
La osteopatía en el embarazo
Cuando una mujer se queda embarazada son muchos los cambios que su organismo va a vivir durante los siguientes 9 meses, ya que esta va a experimentar tanto una evolución física como hormonal. La osteopatía en este caso esta muy bien adaptada porque consigue liberar a las embarazadas de los dolores y las náuseas típicas del embarazo.
Como cada embarazo es un mundo, en este caso el osteópata tiene que hacer una terapia para cada embarazada adaptándola a cada situación, ya que todas no van a necesitar el mismo tratamiento. Para ello, el osteópata va a estudiar cómo avanza el embarazo, cuidará los nuevos parámetros de espacio del cuerpo de la embarazada, el comportamiento de su anatomía y los desajustes que la embarazada va a sufrir utilizando técnicas preventivas al dolor y específicas a cada parte del cuerpo.
Las zonas del organismo de la mujer embarazada que pueden verse más afectadas, y que están más susceptibles a alguna lesión o dolor van a ser el estómago debido a la falta de espacio que poco a poco va a ir adquiriendo, el hígado y el páncreas, por el mismo motivo que el anterior y sobre todo la columna vertebral, que va a ser una de las zonas que más dolor puede provocar en la embarazada debido a que esta va a tener que adaptarse, llegándose a sufrir contracturas y molestias musculares.
Beneficios de la osteopatía en las embarazadas
Como ya hemos adelantado antes, la osteopatía va a ayudar a las embarazadas en su periodo de gestación a mejorar su calidad de vida y a aliviar los dolores que este provoca.
Por un lado, el osteópata utilizará la osteopatía para mejorar la capacidad respiratoria de la embarazada ya que se producirá un aumento en los músculos implicados en la respiración y por tanto notará una evolución en el sistema nervioso y respiratorio. También evitará el dolor de lumbago o ciático que es bastante normal que aparezcan durante el embarazo debido al crecimiento del bebé y a la adaptación de esta zona para ello.
Otro aspecto bastante normal en la gestación es que la futura mamá sufra de migrañas, cefaleas o dolores originados por la tensión. Estos en algunas ocasiones pueden venir acompañados de nauseas y vómitos, que pueden desaparecer gracias al tratamiento de un osteópata.
La retención de líquidos es un aspecto muy común, sobre todo en las últimas semanas del embarazo y la osteopatía a través de masajes circulatorios y tratamientos linfáticos pueden conseguir que esta incómoda sensación de hinchazón desaparezcan.
Disfrutar del embarazo es una de las cosas más bonitas que puede brindarnos la vida, ya que durante estos 9 meses llevamos dentro de nosotras la vida de otra persona, por lo que recurrir a la osteopatía para poder sentirnos lo mejor posible y reducir los dolores y los síntomas típicos de esta etapa es una gran idea.