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¿A partir de qué edad deberían nuestros hijos tener su propio cuarto?
¿A partir de qué edad deberían nuestros hijos tener su propio cuarto?

HABITACIÓN

¿A partir de qué edad deberían nuestros hijos tener su propio cuarto?

Cuando los niños y niñas van creciendo, necesitan su espacio propio, aunque sea con su habitación o compartiéndola con un hermano.

Son muchas las circunstancias por las que los niños deben compartir habitación con sus padres o con sus hermanos. Cada familia es un mundo y es importante respetar que las decisiones de dormir acompañados o no pueden tener muchos motivos detrás. Pero además de esto, hay algunas preguntas que los padres se realizan, ¿a qué edad los niños pueden tener su propio cuarto?

En ocasiones, quizá por falta de espacio los niños deben compartir el dormitorio con sus hermanos o hermanas, en otras circunstancias, los niños duermen en el dormitorio de sus padres algunos años desde el nacimiento. Pero quizá, en el primer caso la familia se haya mudado a otra casa donde ya sí hay espacio para todos, o quizá en el propio hogar se ha podido adaptar una estancia como dormitorio para los hijos. En el segundo caso, quizá los padres se han acostumbrado a dormir con sus hijos y no saben a qué edad sería la más adecuada para que sus pequeños puedan tener su propio cuarto.

A partir de qué edad deben los niños tener su propio cuarto

El término 'deben' es relativo, puesto que es una decisión personal que tanto niños como padres deben elegir. Los niños si quieren pueden dormir solos en su dormitorio a partir de los 3 años, por lo que con una buena cama con seguridad para que no se caiga no tendría que haber problema para que el pequeño pudiera tener su propio dormitorio.

Los niños pueden dormir solos desde los 3 años, pero no es necesario que lo haganLos niños pueden dormir solos desde los 3 años, pero no es necesario que lo hagan

Incluso, hay padres que deciden que sus hijos tengan su dormitorio mucho antes para que a medida que vaya creciendo pueda disfrutar de su independencia y 'su lugar' dentro del hogar. Pero es a partir de los 3 años cuando los niños pueden contribuir a tomar esta decisión junto con los padres y decidir si quieren tener su propio dormitorio o seguir compartiéndolo.

En el caso que se pueda tener espacio para que los niños tengan su propio dormitorio es buena idea fomentarlo por varias razones.

Ventajas de que los niños tengan su propio dormitorio

Hay algunas ventajas que son necesarias tenerlas en cuenta para decidir pasar a los hijos a su propio dormitorio:

- Mayor independencia

- Tienen un lugar de refugio dentro de su hogar

- Tendrán su propio espacio personal

- Podrán compartir el espacio con los demás cuando decidan y no por obligación, teniendo espacio para su propia intimidad

Aunque tengan que compartir habitación, es importante que los niños tengan su espacioAunque tengan que compartir habitación, es importante que los niños tengan su espacio

Qué pasa si no se puede

Pero en ocasiones no se puede escoger y los niños deben compartir el dormitorio con sus hermanos, por falta de espacio o por el motivo que sea. En estos casos no es tampoco un problema porque los niños aprenderán a compartir y establecerán un vínculo más estrecho con sus hermanos, ya que pasarán gran parte del día con ellos.

Pero que compartan el dormitorio no significa que no puedan tener también su propio espacio personal y que se respete su intimidad y sus cosas. Por este motivo, si los niños tienen que compartir un espacio es necesario que se delimite bien las zonas que serían de cada uno y que si alguno necesita soledad en algún momento determinado, se repte. Se puede colocar un biombo en el dormitorio para poder establecer una zona de soledad para que puedan usar siempre que sea necesario.

Lo que resulta imprescindible es que aunque los niños compartan el dormitorio, sean capaces de ser ellos mismos y de tener su propio espacio personal, sin que otros lo invadan.

Por estos motivos, que los niños tengan su propio dormitorio puede ser una buena idea, pero en el caso que no se pueda tener no es el fin del mundo y también tienen sus ventajas. En ambos casos, lo que más importa es el respeto y la comprensión.

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