Cuando tus hijos estén nadando o jugando en la piscina no debes quitarles los ojos de encima, si estás con ellos mejor y si no puedes porque por ejemplo son clases de natación, asegúrate de que haya un socorrista acreditado cerca vigilando que tu hijo esté a salvo todo el tiempo. Nunca dejes a tus hijos solos cerca del agua, ni siquiera cuando están en la bañera.
Es necesario que todos los padres sepan qué es el ahogamiento en seco y qué se debe hacer cuando ocurre. Los expertos definen el ahogamiento como un problema para respirar, cuando hay agua en las vías respiratorias. Normalmente ocurre durante un baño, pero también puede ocurrir como algo tan simple como tener agua en la boca. Aunque no siempre es fatal es necesario reconocer los síntomas, puesto que para sobrevivir a un ahogamiento es necesario recibir ayuda profesional de inmediato.
El ahogamiento seco
El ahogamiento en seco también es conocido como ahogamiento secundario, pero pueden comprenderse de formas diferentes. El primero ocurre cuando ocurre el agua nunca llega a los pulmones, pero al respirar agua hace que las cuerdas vocales de los niños sufran espasmos y se cierren. Cuando esto ocurre las vías respiratorias quedan bloqueadas y la respiración se imposibilita. El segundo se utiliza cuando entra agua en los pulmones, entonces se irrita el revestimiento de los mismos y se acumula líquido, lo que causa un edema pulmonar. Los niños tendrán problemas para respirar y puede empeorar en las siguientes horas, aunque estén fuera del agua.
Síntomas del ahogamiento en seco
-Tos
-Dolor en el pecho
-Dificultad para respirar
-Sentirse extremadamente cansado
Los niños pueden experimentar cambios en su comportamiento, se sentirán más irrigados, tendrán menos energía o estarán apáticos. Esto puede ser porque el cerebro no está recibiendo el oxigeno que necesita para funcionar correctamente.
Qué hacer cuando ocurre
Si notas que tu hijo tiene problemas para respirar después de salir del agua, no lo dejes pasar, acude al médico urgentemente. Aunque los síntomas pueden desaparecer solos es mejor que lo examinen para evitar complicaciones.
Si el niño recibe ayuda médica rápidamente se podrá tratar de inmediato. Es necesario que vigiles a tu hijos las 24 horas posteriores de que tu hijo haya tenido algún problema en el agua (casi se ahogue, trague demasiada agua, etc).
Si los síntomas no desaparecen, o si empeoran, tendrás que llevar a tu hijo inmediatamente a urgencias del hospital. Tu hijo necesitará una radiografía de tórax, una vía intravenosa y estar en observación por profesionales. En el hospital podrá recibir toda la ayuda médica necesaria y controlarán que pueda respirar correctamente y que su cerebro recibe la cantidad de oxígeno necesaria.
Más vale prevenir
Lo más importante que puedes hacer para que esto no ocurra es que prevengas estas situaciones. Cuando tu hijo esté en el agua tendrás que vigilarle tanto cuando esté dentro como cerca del agua. Nunca permitas nadar a tu hijo en zonas profundas o poco vigiladas, y jamás le dejes solo en el agua. Si tienes un bebé nunca le dejes solo en la bañera, aunque tenga poca cantidad de agua.
En cuanto puedas inscribe a tus hijos en clases de natación para que sepan nadar y tener un comportamiento seguro dentro del agua. Si tienes una piscina en casa y tienes hijos pequeños, la piscina tendrá que estar bien vallada y cerrada para que los pequeños no pasen solos bajo ninguna circunstancia.
El ahogamiento puede ocurrir en cualquier tipo de agua: bañeras, inodoros, estanques o pequeñas piscinas de plástico. La seguridad del agua es lo más importante, tanto en bebés, o niños e incluso, en tus hijos adolescentes. Deben aprender un buen comportamiento cuando estén cerca del agua a cualquier edad.