En la etapa de la adolescencia nuestro cuerpo experimenta diversos cambios tanto emocionales como físicos. Entre ellos está el acné.
¿Qué es el acné juvenil?
El acné es una afección de la piel que se muestra mediante distintos granitos, bultitos, quistes o puntos negros. Puede aparecer por distintas zonas del cuerpo: la cara, el cuello, la espalda y los hombros.
Es fundamental acudir al dermatólogo para que diagnostique el tipo de acné
Tipos de acné
Acné vulgaris: Es el acné de tipo más leve. Aparecen granos y puntos negros pero en cantidad moderada, y en pocas zonas del cuerpo.
Acné populoso: Es un acné más evidente. Hay más cantidad de granos y puntos negros, son de mayor tamaño, aparecen por más zonas, o en zonas concentrado.
Acné atrófico: Es un tipo de acné populoso pero ha evolucionado de forma muy intensa, dejando marcas o pequeñas cicatrices en la piel, tras desaparecer el grano o punto negro.
Remedios caseros para prevenir el acné
Para prevenir el acné de nuestros hijos existen muchos productos en el mercado, todos con componentes químicos, contienen alcohol, y otras muchas substancias que no son muy favorables para nuestra piel. Aunque si tu dermatólogo te receta alguna medicación debes seguir el tratamiento.
Pero de toda la vida hemos tenido remedios caseros, pues el acné es mucho más viejo que los laboratorios, por lo tanto ya había remedios para el acné antes de las cremas o lociones artificiales. Vamos a descubrir algunos remedios caseros, muy naturales y económicos :
Ajo: Frotar un ajo crudo en la zona o zonas afectadas, puedes hacerlo varias veces al día, aunque el olor es fuerte.
Zanahoria: Haz un zumo con unas cuantas zanahorias y bébetelo. Es antioxidante, muy sano, no aporta calorías y frenarán el acné.
Vinagre de manzana: Pon una cucharadita de vinagre de manzana sobre un algodón, y humedece la zona afectada por el acné. El ácido del vinagre ayudará a limpiar los poros de la piel.
Pepino: Se puede hacer un zumo licuando varios pepinos y aplicarlo sobre las zonas afectadas por el acné. También podemos beber este zumo. El pepino tiene muchas propiedades, purifica la sangre, la piel y ayuda al sistema linfático.
Claras de huevo: Separar la clara de la yema. Con un algodón aplicar la clara de huevo sobre la zona afectada por el acné, dejarla actuar varias horas, es recomendable aplicarla de noche y así dejarla hasta la mañana siguiente.
Tomate: Licua dos tomates y aplica sobre las zonas afectadas en forma de mascarilla. Deja actuar unos diez minutos y luego lava la cara con abundante agua. El tomate elimina el exceso de grasa.
Albahaca: Poner un par de cucharaditas de hojas de albahaca seca en agua hirviendo, dejar reposar durante 15 minutos, y después aplicar sobre la piel en las zonas afectadas por el acné.
Aloe: Podemos usar gel de aloe, o pomadas de aloe. Se aplican varias veces al día sobre las zonas afectadas, podemos comprarlas en herbolarios o tiendas eco.
Por lo habitual el acné desparece con la adolescencia, pero hay casos de acné más grave, que puede durar más años, incluso en edades adultas. Debemos siempre consultar con nuestro dermatólogo para saber de qué tipo es el acné.