Hoy en día y por desgracia ser mujer trabajadora sigue siendo bastante complicado ya que existen grandes brechas en la sociedad y aún no estamos totalmente a la misma altura que los hombres en muchos aspectos. Seguro que conocerás casos de alguna mujer que ha ido a hacer una entrevista de trabajo y que la han rechazado por ser madre... no será la primera ni la última, desgraciadamente.
Aún hay empresas que piensan que una mujer por ser madre ya no va a rendir lo suficiente en el trabajo porque tiene que cuidar de sus hijos. La realidad es que una mujer puede ser mujer madre y trabajadora y poder llevarlo todo hacia delante sin que eso signifique que no pueda rendir al 100% en su trabajo.
El reto de ser madre y autónoma
Tal y como está la sociedad actualmente son muchas las mujeres que han pensado en la posibilidad de ser emprendedoras y así convertirse en mujeres autónomas que trabajan y al mismo tiempo compaginar su trabajo autónomo con el cuidado de sus hijos. Estamos hablando de mujeres que son madres y autónomas.
El número de mujeres valientes y emprendedoras que se convierten en madres y mujeres autónomas poco a poco va creciendo. Según un estudio de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), nada menos que el 35% de los trabajadores autónomos son mujeres.
A pesar de los obstáculos que puedan encontrarse por el camino, en muchas ocasiones es la mejor forma de poder compaginar maternidad y vida laboral sin encontrarse demasiadas trabas diarias. Aunque compaginar la vida maternal con el trabajo autónomo es igual de estresante que cualquier otro trabajo asalariado pero con la diferencia de que una mujer autónoma no puede caer enferma me cogerse días libres remunerados, porque si no tiene un seguro privado que le pague la baja por enfermedad no podrá llegar a final de mes.
Por si fuera poco una mujer autónoma si no trabaja no cobra y también tiene que pagar la cuota de la Seguridad Social cada mes para poder trabajar y cotizar al mismo tiempo a la Seguridad Social. La vida de la mujer autónoma y madre no es para nada sencilla ni fácil, pero como mujer que es capaz de llevarlo hacia delante y poder compaginarlo sin que a sus hijos les falte de nada.
Poner en marcha un negocio no es nada sencillo y requiere mucha paciencia dedicación trabajo constante responsabilidad y tenacidad. El emprendimiento de las mujeres y también de muchas madres es una oportunidad de empleo propio ya que no encuentran un empleo por cuenta ajena.
El reto de ser madre autónoma en España
Una mujer que quiere ser madre Y que es autónoma tendrá una baja por maternidad establecida por ley 16 semanas. Durante este tiempo recibirán el 100% de su base de cotización al mes anterior a la baja por maternidad. En la actualidad también la mujer que está de baja por maternidad está exenta del pago a la Seguridad Social durante las semanas que dura su baja por maternidad y después tienen una bonificación en su reincorporación durante 1 año.
Pero una mujer autónoma que no trabaja no tiene beneficios. Si la empresa de la mujer trabajadora permanece cerrada no tendrá ningún ingreso adicional Y sólo cobrara a final de mes embarazada cotización que tengan ese momento, en muchas ocasiones es insuficiente. Si encima tiene que contratar un empleado tiene una bonificación del 100% de los seguros sociales de la persona contratada como en sus cuotas de autónomos. Hay que tener en cuenta que la madre tendrá que hacer frente al salario de este empleado por su cuenta. Esto puede ser un problema para la madre autónoma ya que es posible que lo que cobra por su baja maternal tenga que ser eso lo que tenga pagar al sustituto y si no tiene suficientes ingresos, solo tendrá pérdidas.
En cambio si la mujer autónoma es una persona que trabaja por proyectos o por colaboraciones a empresas dependerá de las empresas que la mujer pueda disfrutar de su baja maternal con tranquilidad o sufrir porque se ha quedado sin trabajo o proyectos para colaborar con esas empresas.
El reto de ser madre autónoma y compaginar la vida laboral con la familia
No es fácil compaginar la vida familiar con la laboral en España porque la sociedad está pensada para producir y gastar y se olvidan de lo más importante: la familia. Esto ocurre tanto a mujeres asalariadas como mujeres que son autónomas y que en ambos casos son madres.
La mujer autónoma que trabaja desde casa
Una mujer que es autónoma y trabaja en casa parece que es todo beneficio pero la realidad es que la mujer tiene que aprender a compaginar la vida con sus hijos, La vida con su marido y la vida en pareja, tener las tareas del hogar hechas, con además, tener la suficiente responsabilidad y organización para cumplir todas sus tareas laborales.
No siempre es fácil estar trabajando cuando tienes al bebé llorando coche tu hijo está enfermo. Tampoco es sencillo tener que hacer la comida mientras estás pensando en ir a recoger a los niños al colegio y todo lo que tienes que trabajar durante la tarde y como organizarte para que tus hijos estén atendidos y tú puedes cumplir con la responsabilidad laboral.
La mujer autónoma que tiene negocio físico
Las mujeres autónomas que tienen negocio físico y que no trabajan en casa pero que tienen que acudir a su local cada día, tienen que cumplir un horario que normalmente suele ser el horario comercial. Este horario no suele ser bueno para compaginar con la vida familiar en muchas ocasiones la mujer autónoma se tiene que llevar sus hijos a trabajo, para poder atenderles bien.
Esto muchas ocasiones puede generar desconfianza en los clientes que no conocen a la persona que está frente del negocio. Es por esto que muchas mujeres autónomas se estresan cuando son madres porque tienen que organizar su trabajo porque si no trabajan no cobran Y además tener organizado y el equilibrio la vida familiar.
En la actualidad que una mujer sea madre y además trabajadora por cuenta propia es todo un reto que requiere paciencia, valentía, mucha organización y amor por lo que se está haciendo.