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Ser madre y tener endometriosis, ¿es posible?
Ser madre y tener endometriosis, ¿es posible?

ENDOMETRIOSIS

Ser madre y tener endometriosis, ¿es posible?

Si tienes endometriosis es posible que pienses que no podrás ser madre, pero, ¿es posible?

La endometriosis es una enfermedad que afecta a muchas mujeres en edad fértil, suele diagnosticarse entre los 20 y los 50 años y es muy importante hacerlo cuanto antes para evitar daños mucho peores como puede ser la esterilidad. Es un problema muy complejo y muy misterioso aún y consiste en que el endometrio, que es lo que recubre toda la pared interior del útero, se desarrolla en partes que no debería hacerlo, pudiendo llegar a extenderse a los ovarios, las trompas, la vagina e, incluso, puede afectar a otros órganos cercanos como el intestino. Aún no se sabe porque surge ni las causas que pueden provocarlo y cada mes las hormonas femeninas hacen que el problema siga empeorando.

El gran problema es que es muy difícil diagnosticarla y a veces está ya muy extendida cuando la persona acude a su médico. A veces, los dolores menstruales son un síntoma de esta patología, pero en la mayoría de las ocasiones no se tiene en cuenta y esto hace que pasen años antes de dar con este problema. Mientras este tiempo trascurre, la menstruación sigue presente cada mes en todas las mujeres y esto va empeorando la situación. Lo mejor es acudir a un centro especializado si se tiene la sospecha de padecerla, para pasar por un control ginecológico y una ecografía transvaginal que pueden ser suficientes para su diagnóstico. Si el médico considera explorar otras zonas, mandará otro tipo de pruebas o un análisis de sangre que también permite su identificación gracias al análisis de la CA-125.

Existen unas molestias que las mujeres pueden tener en cuenta y que podrían señalar la enfermedadExisten unas molestias que las mujeres pueden tener en cuenta y que podrían señalar la enfermedad

Posibles señales de la endometriosis

Existen unas molestias que las mujeres pueden tener en cuenta y que podrían señalar la enfermedad, es muy importante prestarles atención y conocer muy bien el propio cuerpo para que, así, sea mucho más fácil detectar las anomalías que puedan surgir y los cambios repentinos que se observen. De esta manera, es mucho más fácil detectar a tiempo cualquier tipo de enfermedad que pueda surgir, entre ellas, la endometriosis. Algunos síntomas pueden ser:

- Una de las primeras pruebas, puede ser la dificultad para quedarse embarazada si se lleva un tiempo prudente buscando el embarazo sin resultados aparentes.

- Si eres de las mujeres que apenas sientes dolores menstruales, y de repente éstos aparecen con intensidad, y no solo durante la menstruación, si no también en el síndrome pre-menstrual; acude a tu médico. Sea lo que sea es algo que debe controlarse siempre.

- El dolor durante las relaciones sexuales también puede ser un síntoma, sobre todo si se da en penetraciones profundas.

- Tener un flujo menstrual abundante y largo.

- También puede manifestarse mediante trastornos de defecación durante el periodo, como pueden ser estreñimiento o diarrea, dolores al ir al baño o, incluso, sangre en las heces.

- Sentir escozor al hacer pipí durante el tiempo de la bajada de regla.

- Dolor en la pelvis de forma permanente o en la región lumbar o, en cualquier extremidad de la zona inferior del cuerpo.

Como se puede apreciar, muchos de los síntomas pueden ser muy normales cuando las mujeres tienen el periodo y, estos, son los mismos factores que hacen muy difícil el diagnóstico certero de la enfermedad.

El tratamiento, una vez diagnosticado el problema de salud, suelen ser a base de medicamentos hormonales como, por ejemplo, pastillas anticonceptivas. Con ellas, se controla por completo el ciclo menstrual y esto reduce la malformación del endometrio. No elimina la patología por completo, pero si es capaz de controlarla y tener los síntomas bajo control.

¿Es posible tener un bebé?

Es verdad que las mujeres que sufren endometriosis lo tienen mucho más complicado que una persona totalmente sana, aún así no es imposible y puede lograrse finalmente. Según un estudio realizado por la Asociación de Endometriosis de España, cada persona es un mundo, por ello, el médico debe evaluar cada caso de forma diferente según la gravedad de la enfermedad de cada chica. Lo primero es asegurarse de que no existen quistes en los ovarios y que no están afectados otros órganos de este mal, sobre todo deben estar limpias las trompas, si todo está bien, se puede empezar con la búsqueda de embarazo de forma natural sin ningún problema.

El tratamiento, una vez diagnosticado el problema de salud, suelen ser a base de medicamentos hormonales El tratamiento, una vez diagnosticado el problema de salud, suelen ser a base de medicamentos hormonales

Una vez todo es correcto, se suspende el tratamiento impuesto por el médico y se puede comenzar. Se establece un periodo de entre 6 meses y un año de búsqueda natural, evaluando mientras tanto como evoluciona la enfermedad ahora que el cuerpo no tiene su protección contra ella. Si pasa este tiempo, todo esta bien y la mujer sigue sin quedar embarazada, se procederá a una intervención quirúrgica que limpiará bien toda la zona y eliminará aquellas causas que obstaculizan el proceso, así se restablece la correcta autonomía de la pelvis. Y si, aún así, no hay éxito habría que recurrir, entonces, a la reproducción asistida.

La endometriosis durante el embarazo

Una vez que la mujer queda embarazada ya puede estar muy tranquila, ya que la gestación no se va a ver afectada por la endometriosis por considerarse un tratamiento natural que lo frena y no necesitará precauciones especiales. En este tiempo de embarazo, el cuerpo produce progesterona por si solo, que es la que ayuda a que la enfermedad no evolucione, por tanto, el organismo está totalmente seguro en estos meses.

Una vez que se ha producido el parto, la mujer debería empezar el tratamiento de nuevo o eso es lo que recomiendan los médicos. Sin embargo, si se quisiera dar el pecho, se puede optar por la "mini-píldora", que se diferencia de las anticonceptivas clásicas en que éstas sólo contienen progesterona y no intervienen para nada con la lactancia.

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