Ser padres no es una tarea fácil, los niños no vienen con un libro de instrucciones debajo del brazo, y hay en ciertas ocasiones en las que una simple decisión puede cambiar la vida de nuestro bebé. Uno de esos momentos cruciales en los que un padre o una madre tienen que tomar una decisión muy importante y relevante en la vida de su hijo es, cuando a los dos meses de vida, el pediatra te habla por primera vez de las vacunas de pago o vacunas voluntarias.
¿Qué son las vacunas de pago o voluntarias ?
Seguramente si estás leyendo este artículo es porque te encuentras en un mar de dudas sobre qué hacer con respecto a las vacunas de pago. Pues bien, desde Bekia vamos a darte todos los detalles.
Cada país realiza su propio calendario anual sobre qué vacunas entran dentro de la sanidad pública y cuáles no. Es decir, realizan un calendario sobre cuales son gratuitas y cuáles son de pago. En España, son tres las vacunas que no entran dentro del calendario de vacunación financiado por la seguridad social, lo que provocará que sean los padres los que elijan si vacunar a sus hijos o no, dependiendo de lo que ellos decidan.
¿Cuáles son las vacunas de pago en España?
En España contamos con tres vacunas que no son financiadas por la seguridad social. Y, aunque estas costarán el dinero a los padres y son consideradas como menos importantes según el estado, la ausencia de ellas puede provocar en nuestro bebé enfermedades bastante graves.
El neumococo es una bacteria que afecta sobre todo a los más pequeños. Esta es la responsable de enfermedades como la neumonía, otitis media, sinusitis y meningitis. La Asociación Española de Pediatría recomienda la aplicación de dicha vacuna a nuestro bebé en el periodo entre los 2 meses y los 5 años, ya que entre 13 y 107 niños entre 100.000 contraen cada año el neumococo. Esta se administra mediante cuatro dosis, a los dos, a los cuatro, a los seis y a los doce meses. El precio de cada dosis ronda en torno a los 75 euros y, aunque puede suponer un esfuerzo bastante grande en algunos casos, es altamente recomendable vacunar a nuestro bebé contra el neumococo. En el caso de que nuestro pequeño tenga una reacción a esta, siempre suele ser dolor, enrojecimiento o inflamación local y, en algunos casos, fiebre baja.
La varicela es otra de las vacunas que no entran dentro del calendario de vacunación financiado por el estado y por tanto, se considera otra de las vacunas voluntarias. La varicela es una de las enfermedades que más se da entre los niños menores de 10 años y, es que su facilidad de contagio hace que se propague de forma muy rápida. Esta se realiza en dos fases diferentes y según la Asociación Española de Pediatría es recomendable realizar la primera dosis de la vacunación a los 12 meses, y la segunda a los 2 o a los 3 años. Esta se aplica a través de la vía subcutánea y, aunque no suele dar problemas ni efectos secundarios en los niños, en algunas ocasiones se han observado casos de dolor o inflamación localizada en el lugar del pinchazo, y en muy pocos casos ha derivado en fiebre leve o pequeñas erupciones en la piel del niño. El precio de cada dosis oscila entre los 45 y los 60 euros.
Por último, la vacuna contra el rotavirus es otra de las vacunas voluntarias que no entran dentro del calendario de vacunación subvencionado por la seguridad social y que es muy recomendable que nuestros hijos la reciban. El rotavirus, es una enfermedad que es altamente contagiosa y que consiste en una gastroenteritis aguda, que puede derivar en vómitos, llegando a causar la muerte de nuestro bebé debido a su deshidratación. Según la AEP todos los niños deberían ser vacunados contra el rotavirus antes de que cumplan las 26 semanas, ya que es la etapa ideal para ello. Esta consta de tres dosis diferentes, a través de vía oral y cada una tiene un precio que ronda entre los 60 y los 70 euros.
Vacunar a nuestros hijos o no, en estos casos, puede convertirse en un verdadero quebradero de cabeza pero recuerda siempre que la salud es lo primero en la vida.